Una medida bastante controversial se acerca en Francia. El país galo, que hace unos días hizo noticia por eliminar la ayuda a los autos eléctricos que se construyen fuera de Europa, ahora sale al ataque de los SUV.
Según informaron medios del Viejo Mundo, el Ayuntamiento de París que es liderada por gobernada por Anne Hidalgo quiere limitar la presencia de los SUV más grandes en la ciudad luz. Y para eso irá directo al bolsillo de los conductores, puesto que se planteará la idea de triplicar la tarifa de estacionamiento para estos vehículos.
La medida se someterá a votación publica el próximo 4 de febrero. De concretarse, se cobraría 18 euros por hora a los SUV que estacionen en el radio que va desde París centro hasta el distrito XI; y 12 euros a quienes lo hagan entre los distritos XII y XX.
Esta idea no discrimina por tecnología, sino por tamaño, por ende, hasta los eléctricos deberán asumir el alza.
La medida contempla castigar a los vehículos con motores térmicos, a los híbridos recargables de más de 1,6 toneladas y a los eléctricos que superen las dos toneladas.
Con esto, sólo se salvarían los autos más pequeño y en los medianos sufrirían los PHEV y los 100% eléctricos debido al peso.
La opción seguramente causará problemas, debido a que para incentivar precisamente el uso de vehículos cero emisiones, un punto era entregarle beneficio en los estacionamientos. Con esto, se pone bajo tierra a ese beneficio.
Los únicos que quedarían exentos de esta alza serían los residentes de los barrios antes mencionados, los profesionales, las personas discapacitadas, los taxis y los equipos médicos y de emergencia.
Las razones que entregan para justificar esta opción es que el aumento de SUV, el 40 % de las nuevas en Francia, es un riesgo para la calidad del aire, la seguridad y la distribución equitativo del espacio público.