En junio del 2022 te contábamos que en Estados Unidos, específicamente en San Francisco comenzaban a operar los taxis autónomos de la compañía Cruise que pertenece a General Motors.

A los pocos meses, se sumó la empresa Waymo de Alphabet, la matriz de Google. Pero lo que en el papel parecía ser una solución, ha llevado graves problemas para los servicios de emergencia, de hecho, la policía y bomberos ya están cansados de este tipo de servicio.

En las calles de San Francisco cada vez operan una mayor cantidad de vehículos 100% autónomos, gracias a la gran comodidad que ofrece a los clientes.

No obstante, en casos de emergencia, se ha visto la inoperancia de este servicio, e incluso han tenido romper las ventanas de los vehículos autónomos para poder operar de manera segura.

El problema en concreto es que, además de bloquear diferentes cruces, interfieren en las acciones de emergencias en las que deben operar los bomberos y la policía.

Según informa el medio local “Mission”, se está transformando en un problema cotidiano y según señalan los funcionarios en un informe “se trata de un problema cada vez mayor. Creo que hay muchos más incidentes de los que no se está informando”.

Los 15 informes que ha encontrado el medio “Mission” demuestra e identifica el problema que están viviendo los servicios de emergencia, donde señala los altercados con los vehículos operados por Waymo o Cruise, los cuales han interferidos durante una emergencia.

Lo preocupante de los informes es que estos vehículos a medida que van aprendiendo a circular con el tráfico real, se están transforman en “vehículos agresivos” con los servicios de emergencia y los retrasan en sus respectivas operaciones.

Uno de los casos en concreto fue que un vehículo Cruise no quería detenerse pese a que los bomberos le advirtió que no podía seguir, ante esta situación tuvieron que intervenir rompiendo una de las ventanas para detener el vehículo.

Otro de los casos citados, fue que una de las calles se encontraba cortada ya que una de las tranvías de la ciudad se había caído y el auto autónomo siguió su camino, generando mayores problemas.

Uno de los incidente más recientes fue cuando bomberos se vio en la obligación de alejar uno de los vehículos autónomos de un camión que había sufrido un choque y tardaron muchos minutos en poder comunicarse con un operados de la compañía para que pudiera mover el auto a distancia. Sin dudas, un problema que en otros casos pudo haber sido mucho peor.

Por parte de la compañía de Cruise la solución propuesta consiste en llamar a un número de teléfono, sin embargo, no es una propuesta que satisface a los servicios de emergencia, ya que en esos momentos los encargados de bomberos, de una ambulancia o un policía está con bastante carga como para estar perdiendo tiempo llamando a un call center.

El informe del medio local “Mission” es uno de los que da cuenta de los inconvenientes que han ido escalando en los últimos meses.

Según Wired, la Agencia de Transportes de San Francisco le envió una carta a la Comisión de Empresas Públicas de California para que saquen de circulación a estos taxis autónomos o robotaxis, porque piensa que aún no están preparados para operar.

Entre los casos más llamativos, se indica que en diciembre del año pasado la policía fue alertada por Cruise para que fueran a revisar un taxi autónomo, ya que el pasajero no daba señales de vida. Sin embargo, cuando los oficiales llegaron, se dieron cuenta que las personas en el interior estaban durmiendo una siesta.

Ahora, lo más delicado ocurrió con los bomberos, puesto que los citados vehículos no fueron capaces de reconocer una manguera que cruzaba la calle y con la que estaban apagando un incendio.

En un caso, el robotaxi chocó la manguera, tirando a los bomberos al piso y en otro caso paso por arriba de la manguera.