La electromovilidad en las marcas tradicionales e incluso deportivas y de lujo han avanzado a pasos agigantados, no obstante, McLaren toma las cosas con calma y todavía están lejos de hacerse realidad. La hoja de ruta de ellos está aún definiéndose e incluso recién en 2030 veremos al P1 100% eléctrico.
Según reveló el sitio especializado Autocar, McLaren será una de las marcas que tomará con suma tranquilidad la transición y el adiós de los motores a combustión, mientras que ven como una excelente opción los combustibles sintéticos como una forma adicional de mantener vigente en el mercado sus potentes motores a gasolina.
La jugada que ha hecho la firma británica ha sido paciente, en 2012 con el P1 fue un superdeportivo híbrido que se fabricaron pocas unidades, mientras que el más reciente fue el Artura, que llegó a nuestro país en la Experiencia E y se convirtió en el primer híbrido enchufable de volumen.
Luego de este estreno, uno pensaría que el próximo estreno de McLaren sería un vehículo cero emisiones, sin embargo, la marca ha declinado esta decisión y según el propio CEO a Autocar esto todavía no ocurrirá.
Michael Leiters, jefe de la compañía señaló al medio Autocar que “La razón principal de eso es el peso. Queremos hacer un automóvil que sea comparable al 750 en cuanto a peso; no necesitamos 2000 hp. Estamos trabajando en conceptos para eso, estamos explorando y tenemos ideas realmente emocionantes al respecto, pero tiene para superar lo que hacemos en un ICE”.
Leiters, además, afirmó que “Los tiempos están cambiando y tenemos que prepararnos para los nuevos tiempos. El éxito del 750S muestra que a nuestros clientes les encantan los autos ICE, pero tal vez haya otros clientes y estén interesados en otras cosas”.
Pese a estos cambios, sus objetivo en un corto plazo es seguir incursionando en la motorización híbrida, ya que no quiere someterse a esta electromovilidad y perder su ADN, por lo que busca diferentes maneras de reducir las emisiones de CO2.