A más de 50 años del estreno de la primera entrega, Land Rover vuelve a redefinir los SUV de lujo con la llegada de la quinta generación de su Range Rover, el modelo ícono de la firma británica, el cual arriba cargado de novedades, tanto en su diseño como en el apartado de tecnología.
Es que si en algún momento el Range Rover navegaba solo en ese segmento, en los últimos años el buque insigne de la marca inglesa ha debido lidiar con nuevos actores y mirar de reojo a modelos de lujo como el Bentley Bentayga o el Rolls-Royce Cullinan. Y es ahí donde apunta la firma, tratando de bajar su volumen de venta y rentabilizar más sus productos.
Para esto Land Rover ha debido reinventar el modelo, utilizando toda su experiencia en la esencia del modelo y agregando los últimos avances de tecnología a nivel motriz y de seguridad.
“Estamos muy contentos de presentar en nuestro país el totalmente nuevo Range Rover, un modelo que llega a establecer la redefinición del lujo moderno a través del diseño y su equipamiento. Este SUV posiciona a la marca en un nuevo nivel dentro del segmento premium, lo cual representa la estrategia global y local de la compañía”, aseguró José Manuel Márquez, Gerente Land Rover Chile. “La quinta generación de Range Rover escribe el siguiente capítulo de la historia de la marca, la cual mantiene por más de 50 años el sello distintivo de la innovación”, concluyó.
Fabricado en exclusivamente en la planta de Solihull en el Reino Unido, el Range Rover está construido sobre la plataforma MLA Flex multienergía. Mide 5.052 mm de largo (5.252 mm en la variante LWB, la de carrocería extendida), 2.209 mm de ancho, 1.870 mm de alto, tiene una distancia entre ejes de 2.997 mm (3.197 mm la LWB), un despeje mínimo de 219 mm y una impresionante capacidad de vadeo de 900 mm. En su carrocería estándar tiene capacidad para cinco ocupantes, mientras que la LWB viene con tres corridas de asientos y capacidad para siete personas.
Range Rover: diseño de prototipo
Si uno no supiera que es la quinta generación del Range Rover, perfectamente podríamos pensar que se trata de un prototipo justo antes de la presentación final del modelo. Es que gracias a un diseño más minimalista, muy en línea con el Evoque y el Velar, la verdad es que es un diseño limpio y elegante, pero con el ADN del Range Rover, con ese techo flotante y el corte del parabrisas en la zaga, su silueta es inconfundible, por cierto. Con una nueva parrilla, parachoques a ras de la silueta, viene con unos focos pequeños y las manillas solo aparecen cuando se abre el vehículo y las ventanas están diseñadas para que no sobrepasen el marco. Sin duda, el Range Rover de quinta generación, es lujoso solo de verlo. Además, pensando en el futuro y las próximas motorizaciones de cero emisión, su coeficiente aerodinámico es de 0,30.
Dentro de las innovaciones que presenta se aprecia que, si bien la apertura del maletero sigue siendo dual, ahora también es un lugar de descanso y el cliente puede sentarse.
Si de tecnología se trata, la iluminación exterior del nuevo Range Rover está disponible con faros LED digitales que incluyen luces de conducción diurna (DRL) distintivas y proyección de imágenes, compuesto por millones de microespejos que se pueden controlar individualmente para dirigir el haz de luz de forma precisa hacia donde sea necesario. Con una luz larga de carretera de largo alcance de unos 500 metros, el sistema puede identificar hasta 16 objetos y bloquear secciones del haz según sea necesario para proporcionar una mayor iluminación del entorno sin molestar a otros conductores o peatones.
Los nuevos focos LED frontales cuentan con tecnología de iluminación adaptativa que utiliza la información de la cámara delantera y los sensores de lluvia y luz para adaptar la orientación e intensidad de las luces. En tanto, en la parte posterior se priorizó el diseño y se optimizó el trabajo de las luces traseras, las cuales están ocultas y solo se encienden cuando se necesitan, tanto de día, como de noche.
Como era de esperar, todo el lujo que se ve por fuera, se replica en el interior del nuevo Range Rover, manteniendo el minimalismo que va perfectamente acoplado a exquisitos materiales y terminaciones dignas de un SUV de lujo. Destaca el uso de metales, maderas y cueros y la opción de dos colores de interior (Perlino o Ebony).
En cuanto a tecnología, este vehículo cuenta con una nueva pantalla de 13.7″ que presenta nuevos gráficos de alta definición basados en un diseño de tres paneles que refleja intuitivamente el diseño de la pantalla de inicio Pivi Pro, sistema que además incorpora la compatibilidad con Android Auto y Apple Carplay inalámbricos.
Los pasajeros pueden disfrutar de un nuevo sistema de entretenimiento en el asiento trasero (RSE), que proporciona pantallas táctiles HD ajustables de 11.4″ montadas en los respaldos de los asientos delanteros. Se pueden operar de forma independiente y admiten la conexión de la mayoría de los dispositivos con un puerto HDMI. La segunda fila de asientos dispone también de una exclusiva pantalla de 8″ ubicada en el apoyabrazos central “Executive Class”, el cual proporciona un control rápido e intuitivo para la posición perfecta del asiento, elevando la lujosa experiencia del asiento trasero.
Los asientos delanteros cuentan con regulación eléctrica de hasta 24 posiciones, calefacción, refrigeración y masajes, además incluye climatizador de tres zonas de serie y de cuatro zonas disponible para la versión First Edition, con sensor de purificación del aire. En cuanto al sistema de sonido Meridian™ Signature de hasta 35 altavoces.
Incorpora, además, dos eSim que le permiten al nuevo Range Rover actualizar todos los procesadores y módulos. Cuenta con un sistema de WiFi que puede conectar hasta ocho dispositivos simultáneamente y el cargador USB-C de las plazas traseras tiene la capacidad para cargar un notebook sin necesidad de usar un enchufe.
Respecto a seguridad, el Range Rover viene con una extensa lista en este apartado, pero destacan los seis airbags, control dinámico de estabilidad, frenos ABS con EBD, asistente de emergencia, frenado vectorial en curvas, ESP con función antivuelco, Sensor de intrusión, paquete de asistencias a la conducción que incluye soporte para manejo semiautónomo de nivel 2, con control crucero adaptativo inteligente, frenado autónomo y sistema de mantenimiento de carril, monitor de salida segura, sensor de condición del conductor, monitor de tráfico trasero, sensor de punto ciego, entre otros.
De momento, un solo motor para el Range Rover
El nuevo Range Rover ofrecerá de momento en el país un potente motor diésel de seis cilindros 3.0 turbo,c con Mild-hybrid de 48 voltios, con 350 Hp de potencia total y 700 Nm de torque, asociado a una caja automática de 8 velocidades y tracción All Wheel Drive, permitiendo remolcar hasta 3.500 kilogramos. Alcanza los 100 km/h entre 6,1 y 6,3 segundos, según el tamaño del auto.
Se espera que más adelante llegue la variante V8, y el PHEV que permitirán manejo 100% eléctrico en un rango superior a los 100 kilómetros.
Una de las novedades del Range Rover es el nuevo sistema All-Wheel Steering o dirección en las cuatro ruedas, la cual permite que el vehículo – a pesar de su gran tamaño – pueda maniobrarse en espacios reducidos. Para esto, las ruedas pueden girar 7° en dirección opuesta a las delanteras a baja velocidad, reduciendo el radio de giro a solo 10,95 metros.
A esto se suman el sistema de control de la suspensión integrado, el Dynamic Response Pro, que incorpora suspensión neumática electrónica, Adaptative Dynamics y Amortiguadores de válvula doble que cambian hasta 1.000 veces por segundo; y diferencial trasero de bloqueo activo.
Para nuestro país, el nuevo Range Rover estará disponible en tres versiones: HSE (US$ 199.900), First Edition SWB (US$ 250.900) y First Edition LWB (US$ 260.900)