Senado aprueba proyecto para prevenir venta de autos robados y descarta polémica con las motos

Un paso hacia una mayor seguridad en las calles. Esa impresión quedó tras aprobarse en el Senado el proyecto de ley que busca implementar nuevas medidas para prevenir la venta de autos y otros vehículos motorizados robados en Chile.

Los parlamentarios se volcaron a favor de la iniciativa por 28 votos, con solo una abstención, proceso que ahora permitió ser despachada para ser promulgada por el Ejecutivo.

La nueva ley, que modifica la Ley de Tránsito, tiene la finalidad de prevenir la venta de vehículos motorizados robados y disminuir las encerronas, portonazos, desarme y venta por piezas, entre otros ilícitos que se cometen.

Con esta la ley entonces entrar en juego diversos cambios, como la obligación de grabar la placa patente en los vidrios y espejos laterales; además de la prohibición de conducir con luces y focos diferentes a los autorizados.

La nueva normativa también fortalece las sanciones para quienes conduzcan un vehículo con placa patente falsa o alterada y también a quienes inscriban esos vehículos en el Registro Civil, sabiendo que el número de chasis del vehículo (VIN) se encuentre adulterado, borrado o sea de dudosa procedencia.

En cuanto a las penas, ahora se considerará como falta gravísima conducir un vehículo con la placa patente oculta o con objetos que obstaculicen la percepción. En este caso, la multa puede llegar hasta las 3 UTM, o sea, unos $ 200 mil.

También se le sancionará de la misma manera a quienes utilicen un medio de transporte con placa patente en mal estado que dificulte la identificación. Esto, para atacar situaciones que se están repitiendo en el último tiempo y donde ciertas personas ocupan luces para dificultar la visión y así evadir el pago del TAG.

El proyecto de ley contemplaba un polémico punto, relacionado con las motos y que tenía por objeto obligar a los motociclistas a portar cascos rotulados con la placa patente de su vehículo en uso, con detalles sobre su adhesión, tamaño y color de las letras y números proporcionados por un reglamento del Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones.

Si bien esta indicación ingresada por el Ejecutivo fue aprobado por la Comisión de Transportes de la Cámara de Diputados en su segundo trámite constitucional, generó una serie de críticas, incluyendo a la Asociación Nacional de Importadores de Motos (ANIM), por las complicaciones que conlleva y por la opción de que una persona pueda manejar distintas motos con el mismo casco.

Para evitar más dilataciones con el proyecto de ley, se decidió no insistir con esa indicación para poder avanzar con la ley.