Antes de que el Coronavirus se desplegara por el mundo, obligándonos a quedarnos en casa, en el CES de Las Vegas de este año, Sony presentó un prototipo de auto 100% eléctrico denominado Vision-S.
Muchas cosas han pasado desde entonces, y aunque la apuesta era que probablemente nunca lo construyeran, resulta que el vehículo definitivo ya fue fabricado en Austria y llegó a Tokio para comenzar son sus primeras pruebas en calles reales.
Si bien el modelo de Sony se anunció como una manera de mostrar las tecnologías de la marca y todo lo que podía hacer, al parecer el Vision-S se convertirá en mucho más que un conceptual, y es que con esta acción, la marca ya ha señalado su real interés en participar en la carrera por la electrificación.
El Sony Vision-S mide tres metros de largo, pesa 2.350 kilos y tiene espacio para cuatro pasajeros, y se mueve gracias a dos motores eléctricos (uno en cada eje) de 200 kW cada uno, por lo que ofrecería tracción total y una aceleración de 0 a 100 km/h en unos 4,8 segundos.
El modelo estaría construido sobre una plataforma que también se podrá adaptar para SUV, aunque todavía no se tiene una cifra definitiva de cuál será su autonomía definitiva.
Además de eléctrico, el Vision-S cuenta con múltiples sensores y cámaras que le permitirían adaptarse fácilmente a la conducción autónoma, ofreciendo altos niveles de asistencia, todo gracias a su conectividad 5G y actualizaciones permanentes sin conexión.
