Después de múltiples adelantos, finalmente Aston Martin presentó hace algunas horas el DBX, su primer familiar en más de 100 años de historia. Si en 2018 ya se había revelado su nombre, este año se había confirmado su poderosa motorización V8. Es que tanta preparación en la firma británica tiene su razón de ser: en su comunicado Aston Martin llama al DBX como ‘el iniciador de una nueva era de la compañía’, una etapa que, por cierto, no se aleja de valores tradicionales como el lujo, la deportividad y el refinamiento. El SUV alcanzará los 291 km/h.

El DBX es dueño de una elegante silueta en cuerpo de SUV coupé. Por el frente, goza de una enorme parrilla de seis líneas horizontales cromadas, para dejar los grupos ópticos en forma de gota en cada costado. Sobre el centro de la grilla, en tanto, nace un capó musculoso por el centro que se va abriendo hacia ambos pilares A. A mitad de camino, la tapa del motor lleva dos entradas de aire.

De costado, el perfil sport del DBX se confirma con manillas retráctiles, pensadas para oponer menor resistencia al viento, y una notoria salida de aire detrás de las ruedas delanteras. El techo, en tanto, termina con un alerón que deja pasar el aire por el centro para caer en un portalón encorvado que también agrega carga aerodinámica el eje trasero.

En su cara trasera, esa mismo final que se aprecia desde la vista lateral sirve para que los ingenieros hayan dotado al DBX de la misma luz que atraviesa todo el ancho y que es siempre más alta en el centro. Abajo, en el último cuarto de la zaga, el familiar cambia a tono negro y encierra dos salidas de escapes.

La carrocería está moldeada en aluminio en la planta de St. Athan, Gales, y pesa 2.245 (54% adelante y 46% atrás). Junto con ser el primer SUV de la marca, el DBX es también el único Aston Martin con capacidad para cinco ocupantes. Además, dispone de nada menos que 632 litros de capacidad en el maletero.

En este apartado no existen grandes novedades, puesto que la marca de lujo había entregado los detalles en septiembre pasado. El DBX está animado por un motor de 4.0 litros biturbo de 550 caballos y 700 Nm de par, idéntico al corazón que ya equipan los coupés Vantage y DB11. La fuerza se envía permanentemente a los dos ejes mediante una transmisión de nueve relaciones. Todo el conjunto hace que el DBX pueda viajar a una máxima de 291 km/h e ir desde 0 a 100 km/h en 4,5 segundos. Si se lo quiere frenar, el familiar británico equipa frenos de disco delanteros de 410 mm de diámetro y traseros, de 390 mm.

El interior, el sistema de infoentretenimiento con pantalla de 10,25" (compatible con Apple CarPlay) preside el tablero. En tanto, el volante es muy similar al del Aston Martin DB11, lo que acentúa también por dentro los rasgos deportivos del modelo. Pensado también en el conductor, la instrumentación recae en un display de 12,3".

Desde Aston Martin en Chile señalan que esperan el arribo a Chile del DBX para mediados de 2020. Su precio para Estados Unidos, Japón, Alemania y el Reino Unido roza los $ 165 millones.