Fiel a lo que ha sido desde el principio, la Tesla Cybertruck continúa siendo uno de los vehículos más controversiales del último tiempo. Esto porque ahora se conoce que la firma californiana ha incluido una inesperada cláusula en el contrato de compra.
Tal como se anunció hace unos días, las primeras entregas de la pick-up eléctrica se producirán el próximo 30 de noviembre. Desde entonces hasta transcurrido un año, sus dueños no podrán venderla. De lo contrario, se exponen a una sanción de 50.000 dólares y se arriesgan a que Tesla no les vuelva a vender nunca más un auto.
En el caso de que el cliente quiera vender la pick-up dentro del primer año de vida del mismo tendrá que solicitar permiso a la propia marca, que además se reserva el derecho de recomprarlo. El precio a pagar por el fabricante para recuperar el Cybertruck será el original menos 25 centavos de dólar por cada milla recorrida más el desgaste que se valore y el costo que tenga repararlo.
Tesla no ha confirmado si esta polémica norma sólo será válida para la primera tirada de la Cybertruck o si la mantendrá mientras el vehículo se fabrique. Asimismo, sólo tiene previsto conceder permiso para venderla dentro de su primer año de vida a aquellos clientes a los que les haya surgido un imprevisto, de una cuantía económica importante.
Este tipo de cláusula no es nueva en la industria. En el caso de los autos de lujo, tienen dos funciones. La primera, oficialmente, es evitar la especulación. La segunda, menos conocida, es evitar que alguna personalidad poco recomendable, como un dictador, pueda hacerse con uno de esos vehículos vía algún compra-venta o intermediario.
Ahora bien, en el caso de Tesla, el fabricante quiere contener la posible competencia que supondría la reventa prematura de una Cybertruck recién entregada. Frente a un tiempo de espera largo, muchos no dudan en comprar de segunda mano para poder tener su unidad más pronto.
