[Test Drive] Hyundai Ioniq: Cuando la electricidad es la única diferencia
<p>Quién hubiera pensado, hace sólo unos años, movilizarse a gran velocidad en un auto impulsado ciento por ciento por electricidad. Hoy es posible en Chile, gracias a modelos como el Hyundai Ioniq eléctrico. Es una experiencia muy distinta. Partiendo por su carga, que fue lo primero que nos tocó hacer. Con 30 km de autonomía […]</p>
Quién hubiera pensado, hace sólo unos años, movilizarse a gran velocidad en un auto impulsado ciento por ciento por electricidad. Hoy es posible en Chile, gracias a modelos como el Hyundai Ioniq eléctrico.
Es una experiencia muy distinta. Partiendo por su carga, que fue lo primero que nos tocó hacer. Con 30 km de autonomía salimos de las instalaciones de Minvest, distribuidor de la marca coreana en el país, hacia la estación de recarga en Costanera Norte. Conectamos el cargador rápido a la red y en poco menos de media hora ya estaba al 80%, es decir, con unos 186 kilómetros disponibles para rodar. Una maravilla, que se vio empañada por la dificultad para desconectar el cargador, pues el sistema tenía su maña. Si bien no fue necesario, también hubiésemos podido cargarlo desde la red domiciliaria, a través de una toma de corriente convencional, pero habría tardado 12 horas para estar al 100%.
Gracias a un bloque a baterías trifásico de imanes permanentes alcanza 88 kW (equivalentes a 120 Hp) y un torque que llega a los 295 Nm. Su velocidad máxima se anota en los 165 km/h y está autolimitada para no afectar la autonomía.
Extremadamente silencioso, es lo primero que llama la atención cuando se prende el motor (al presionar el freno y el botón de encendido, como cualquier vehículo automático). Si no es por el testigo verde que aparece en el tablero digital, no nos damos cuenta de que estamos listos.
Ya en marcha, pronto nos percatamos de que tiene prestaciones suficientes para circular con desahogo por cualquier escenario. De hecho, una de las cosas que más gusta de este auto -y de todos los vehículos eléctricos- es que entrega su par máximo desde que arrancamos, mostrando una gran respuesta desde el principio. Agresiva si se pisa el pedal, fuerte y suave si se lo toca ligeramente.
Pero ahí no acaba todo. Un selector con tres modos de conducción (Eco, Normal y Sport) permite jugar un poco, según se busque eficiencia o prestaciones. Si bien la carga se consume más rápido en cualquiera de los usos no ecológicos, la conducción se siente bastante más ágil, sobre todo en modo Sport.
Un sistema de frenada regenerativa variable permite recuperar energía al desacelerar en cualquiera de los modos.
El Ioniq EV tiene una vocación evidentemente urbana, con un gran empuje desde parado, una sensación de solidez al volante y frenos muy capaces. En autopista anda muy bien, se siente dinámico, gracias a un buen mix de agilidad, aplomo y estabilidad.
» Más allá de su energía
El Ioniq EV es un sedán de 4,47 metros de largo, con un estilo moderno, pero convencional, que acoge bien hasta cinco ocupantes y dispone de 450 litros de maletero, nada mal considerando el gran espacio que demandan las baterías.
Al interior luce como cualquier otro Hyundai, con una correcta percepción de calidad y un buen nivel de acabados. Podría verse mejor si optara por materiales tradicionales, pero hace gala de su filosofía ecológica, al estar construido con elementos como caña de azúcar, madera en polvo y piedra volcánica, así como biotelas y plásticos reciclados.
Llama la atención, y no para bien, la disposición de una diminuta pantalla táctil de cinco pulgadas con bluetooth, puerto USB y entrada auxiliar. Hoy por hoy, un sistema de infoentretenimiento muy pobre, sobre todo considerando el precio del auto.
El equipamiento es bueno, pero no sobresaliente. Destacan los asientos con ajuste eléctrico con memoria y calefaccionados, smart key y botón de partida, climatizador, aunque en seguridad destaca por el sensor de lluvia y luz, siete airbags, asistente de partida en pendiente, sensor de punto ciego con alerta de tráfico cruzado y cámara de retroceso.
En resumen, un auto cómodo, fácil y agradable de manejar. Además, una gran opción para el medioambiente.
A favor: Una conducción silenciosa, limpia y eficiente, con un gran poder de aceleración desde cero.
En contra: Una relación precio/materialidad/equipamiento algo justa para lo que se debe cancelar.
Ficha técnica Hyundai Ioniq EV
» Motor: eléctrico » Potencia: 88 kW (120 Hp) » Torque: 295 Nm » Transmisión: caja reductora de velocidad única » Maletero: 450 litros » Precio: $ 24.490.000.
Comenta
Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.