Uno de los prejuicios que se tienen con los vehículos amigables con el medio ambiente es que son menos emocionantes. Que en su afán por contaminar menos se llevaron la diversión. Palabrerías que a veces tienen poco sustento, como pudimos comprobar con el Lexus NX 300h, modelo híbrido que se encarga de demostrar lo contrario, con una puesta a punto osada, que es bienvenida en un segmento que de tanta masividad se hace monótono.

En el exterior, es uno de los pocos SUV que logran una personalidad distintiva. Líneas radicales y angulosas dan vida a un frontal agresivo con una parrilla "doble punta de flecha", como la denomina Lexus. A esto se agregan grupos ópticos LED afilados con forma de L, amplios pasos de rueda, una línea de cintura ascendente y nervaduras en las zonas laterales que refuerzan su imagen robusta. Uno de los SUV más reconocibles del mercado.

En el interior del Lexus NX 300h, la calidad de los materiales, las buenas terminaciones, la comodidad de los asientos y el intento por hacer más sencilla la experiencia de manejar se perciben con claridad, más aún con la botonería que es menor respecto de otros modelo. Eso sí, el mando que dispuso la marca para manejar la pantalla central de información -que no es táctil- y que funciona como si fuese el mouse de un computador, obliga a sacar una mano del volante para hacerlo funcionar, lo que es algo distractivo para el conductor.

Del resto, una serie de elementos para destacar, como el enorme techo panorámico, el cargador inalámbrico para algunos smartphones, mientras en seguridad la presencia de ocho airbags lo hacen sobresalir. Lo extraño es que, a pesar de todos los avances del Lexus NX 300h, no cuente con navegador ni con sistemas para enlazar teléfonos (Apple CarPlay ni Android Auto), algo que sí está presente en otros mercados y que hoy es un desde, incluso, en marcas generalistas.

Al momento de movernos, el Lexus NX 300h vuelve a sacar puntaje alto. Agilidad y aceleración inmediata que nos hacen salir de complicaciones con sencillez, suspensión áspera que favorece la deportividad (especialmente al salir de curvas), pero que no hace sufrir a los ocupantes debido a que va absorbiendo los impactos sin traspasarlos al habitáculo, dirección con enorme tacto, gran capacidad de frenado.

Y todo esto con un tren motriz que mezcla el bloque a combustión de 2.5 litros que trabaja en conjunto con uno eléctrico. En total se extraen 197 caballos, pero con consumos de gasolina medianamente acotados, los que se pueden mejorar si el conductor prioriza un estilo de manejo eco-amigable, leyendo de manera correcta el medidor dispuesto en el panel de instrumentos, donde se va mostrando el nivel de potencia y la regeneración de energía del sistema híbrido.

Otra cualidad positiva que nos encontramos en el Lexus NX 300h fue la posibilidad de escoger el modo de manejo. Así, podíamos variar desde estilos más eficientes a más deportivos (Eco, Normal, Sport S, Sport S ) o también en modo 100% eléctrico, aunque esto fuese por distancias muy reducidas.

En conclusión, un modelo que marca diferencias, que carece de algún tipo de equipamiento que exigen los usuarios actuales, y que en la ciudad sorprende por su agilidad, deportividad y eficiencia.

• » Motor: 2.5 litros motor eléctrico
• » Potencia: 197 Hp
• » Torque: 210 Nm
• » Caja: CVT

• » Largo: 4.630 mm

• » Maletero: 465 litros
• » 0-100 km/h: 9,2 seg.
• » Precio: $ 38.700.000