Luego de su bullado regreso a la Fórmula 1 (que se confirmó en julio pasado), Fernando Alonso ahora enfrenta un nuevo e inesperado desafío: la recuperación tras el atropello del que fue víctima este jueves en Lugano, Suiza, mientras entrenaba en su bicicleta. Finalmente el asturiano debió ser operado durante la misma noche de ayer cuando el equipo médico que lo atendió en el Hospital de Berna constató la fractura del hueso maxilar.
Junto con la reubicación ósea, a Alonso también le fueron retiradas piezas dentales que deberán ser reparadas o sustituidas por implantes. Ahora el bicampeón español se encuentra bajo estricta observación durante dos días, a lo que luego seguirán jornadas de reposo con medidas menos restrictivas.
Si en un principio se temió que el piloto pudiera perderse el arranque de la temporada 2021 de la Fórmula 1, a fines de marzo, lo cierto es que el hueso maxilar no interviene en el ajuste del casco como sí lo hace la mandíbula. Fue el propio equipo Alpine Renault que tuiteó que confía en que el dueño de su butaca Nº 1 se recupere satisfactoriamente para retomar cuanto antes su preparación.
En la misma publicación, el propio Alonso agradeció la preocupación y dijo “estoy bien, espero que 2021 comience. ¡Vamos!”. Pese a la violencia del siniestro, parece ser que todo fue más que nada un gran susto...
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