Fue en 1952 cuando Porsche quiso probar suerte en la Carrera Panamericana, una prueba de rallye muy famosa y exigente, que se celebra anualmente en México. Entonces se aventuró con un 356 S Cabriolet con el dorsal número 11, conducido por el príncipe Paul Alfons von Metternich y el barón Manuel Antônio de Teffé, dupla que logró terminar la prueba en octavo lugar tras una dura semana de competición.
Pues bien, hoy la firma alemana rinde homenaje a aquel mítico ejemplar con un one-off muy especial, revelado con motivo de la 35ª edición de la “era moderna” de la famosa carrera. Un proyecto conjunto de las divisiones de Latinoamérica y México de la firma alemana.
Hablamos del Porsche 911 Carrera Panamericana Special, cuya estampa se destaca por una serie de peculiaridades. Partiendo por el color de su carrocería, un azul Gentián metalizado, que también se presenta en las llantas -de 20″ delante y 21″ detrás-, con la parte central en gris y las pinzas de freno negras.
La capota de lona, en tanto, luce un color gris Graffiti y la parrilla del capó del motor un tono blanco. De perfil el número 11 en negro sobre un fondo blanco se lleva casi todo el protagonismo. El restante es para el escudo de la Panamericana.
Puertas adentro, este especial 911 se distingue por unos asientos en piel gris Crayón con detalles en azul como los ribetes y el casco de la Panamericana bordado en los reposacabezas.
El mencionado color gris también está en los paneles de las puertas, y hace juego con el gris Pizarra presente tanto en el tablero como en el volante.
Este one-off también cuenta con umbrales de las puertas personalizados, cuentarrevoluciones y el reloj central en blanco, reposabrazos central con el logo de Porsche Exclusive Manufaktur en azul Grafito, además de la inscripción “911 Carrera S - La Carrera Panamericana 1952″ en el lado derecho del tablero.
“Buena parte de la exitosa historia de Porsche en el automovilismo deportivo comenzó a forjarse en la Carrera Panamericana, la que para muchos expertos era el rallye de asfalto más exigente del mundo en la década de 1950″, señala Camilo San Martin, director de Porsche México.
“Nos parece muy acertado recordar las grandes gestas de la marca en la Panamericana con un modelo único, el 911 Carrera Panamericana Special, un auto repleto de detalles que recuerdan al 356 Super Cabriolet que en 1952 no solo hizo historia por ser el primer Porsche en correr y terminar la prueba, sino por lograr la victoria en la categoría de vehículos con motor de hasta 1.500 centímetros cúbicos”, puntualiza.
Dado que el Panamericana Special está basado en un 911 Carrera S Cabriolet, bajo el capó se encuentra un propulsor bóxer turboalimentado de seis cilindros y 3.0 litros que desarrolla un total de 450 Hp y un par máximo de 530 Nm. Toda esa energía se envía al tren trasero previo paso por una caja PDK de doble embrague con ocho velocidades.
Porsche explica que esta unidad será subastada el próximo año y parte de la recaudación irá destinada a una fundación de beneficencia social.