En Chile son conocidos los casos de estafas a la hora de comprar un auto usado, por lo que es un tema al que hay que prestarle mucha atención. Desde kilometrajes adulterados hasta fallas disimuladas, es importante estar atento a las posibles mentiras que te pueden decir los vendedores.
Para conocer los cuentos más comunes que aparecen al momento de intentar vender un auto de segunda mano, conversamos con algunos vendedores de concesionarios que se han topado con insólitas situaciones por parte de clientes que intentan dejar autos en parte de pago omitiendo las condiciones reales y también con dueños de vehículos usados que se encontraron con el “verso” de algunos inescrupulosos. Aquí las mentiras más utilizadas y lo que deben tener en cuenta para detectar este tipo de anomalías.
- Kilometraje adulterado
“Único dueño, nunca taxi”. Es una de las mentiras más comunes y el objetivo es hacer creer que le vehículo tiene poco desgaste. Por eso, el kilometraje adulterado representa la mayor cantidad de intentos de estafa por parte de clientes que tratan de elevar el valor de retoma de sus autos para que no sean castigados. Sin embargo, desde hace unos años, los registros de revisión técnica que la automotora obtiene por medio de un informe de historial suelen venir con el kilometraje registrado en cada uno de los años, por lo que es la forma más sencilla para detectar este tipo de casos. Otra forma es revisar los manuales, libretas de mantenimiento e incluso los stickers de cambio de aceite que incluyen el kilometraje como recordatorio.
- Fallas de suspensión
“Lo manejaba siempre una mujer”. Es una de las mentiras que delata , aparte de sexismo, el intento por dar a entender que el vehículo siempre se cuidó, ya que al pertenecer a una mujer suma bonos puesto que ellas suelen ser más cuidadosas y respetuosas al volante. Ojo con eso. Un sistema de suspensión con fallas también suele ser uno de los intentos de estafa más frecuentes, por lo que se insiste en que cada auto sea revisado en la zona de los amortiguadores para detectar posibles fugas. Es una de las causas más comunes en el desgaste del vehículo, especialmente si el conductor anterior no era cuidadoso al volante. Si no se revisa, puede caer en un fuerte gasto posterior a la compra.
- El rendimiento siempre es bajo
Al intentar vender un auto, siempre se buscará sacar al máximo las potencialidades que podrían interesar al comprador, por lo mismo, un clásico es que se intente hacer pasar el auto por un vehículo de bajo consumo de combustible. “En ciudad está dando cerca de 20 km/l si se maneja suave” es una frase común, pero basta con revisar la homologación del vehículo en el sitio consumovehicular.cl para revisar cuál es la homologación que tiene. Si supera ese valor, claramente es una mentira.
- Fugas en el motor
Ya sea de aceite, refrigerante o líquido de frenos, la fuga de fluidos en el compartimiento del motor da una idea real sobre la vida útil del auto antes de ingresar al mercado de usados. Es por esto que se necesita revisar minuciosamente el compartimiento del motor en busca de manchas, gotas o cualquier indicio de que algo no anda bien. Un motor en exceso limpio también puede dar sospechas, por lo que dejarlo en marcha mientras se hacen las otras revisiones también puede ayudar a evitar un mal rato para el futuro propietario.
- Mantenimiento siempre en concesionario oficial
Como la idea es vender el auto lo más rápido posible y al mejor precio, otro anzuelo que suelen lanzar los vendedores es el de las mantenciones. “Siempre se revisó en los concesionarios oficiales” suele ser la mentira. Y el problema no es que el vehículo haya sido revisado en algún taller fuera de la marca -puede ser de excelente calidad- sino que se intenta mejorar el precio al estar siempre bajo la revisión oficial de la marca. Para eso, basta con exigir el historial de mantenciones y comprobar si es real. Si por coincidencia perdió el historial, mejor dudar de esa frase.
- Componentes que ya necesitan cambio
Muchas personas suelen reparar los desperfectos justos y necesarios de sus autos antes de venderlos, intentando que otros componentes que también requieren cambio sean asumidos por el nuevo dueño. Es por esto que hay elementos como neumáticos, embrague y frenos que deben ser revisados con una prueba de ruta antes de decidir comprar el auto.
- Historial de accidentes
“Ha tenido uno que otro topón, pero nada grave”. Otra mentira muy extendida entre revendedores, por lo mismo, siempre es necesario inspeccionar puntos clave del auto, tales como los marcos de las puertas, el compartimiento del motor o la zona donde va la rueda de repuesto para detectar si el vehículo ha estado involucrado en un accidente de tránsito, ya que en estas zonas podremos ver secuelas del choque o pintura usada en la reparación del mismo.
- Testigo de fallas en el tablero
Son muchos los inescrupulosos que intentan esconder las fallas que el auto anuncia por medio de luces en el tablero, por lo que siempre es bueno fijarse en un detalle importante: que el auto encienda todos los testigos al momento de dar contacto, ya que es la forma de mostrar que las luces están funcionando. Por lo que si al momento de dar contacto, algún testigo como el Check Engine no se ilumina, es porque ha sido desactivado y si el auto presenta alguna falla, no se encenderá.
- Autenticidad de la documentación
Los autos clonados pueden ser un tremendo dolor de cabeza. Puede ser el último, pero tal el más importante punto de la revisión chequear que los números de chasis y motor declarados en la documentación sean los mismos que tiene el vehículo en cuestión. Parece algo lógico para muchos, pero es una de las causas más graves de intentos de estafa y si no se percatan podrían incluso pasar un mal rato, ya que podrían considerar que al comprarlo son parte del delito.