Una manifestante falleció y 47 más resultaron heridos el sábado durante una protesta que bloqueó carreteras en toda Francia en protesta conocido como los "chalecos amarillos", por la subida del precio de los combustibles, dijeron desde el Ministerio del Interior. Las movilizaciones suponen un nuevo desafí­o para el cuestionado presidente Emmanuel Macron.

Según la policí­a, tres de los heridos tení­an un pronóstico grave, apuntó el ministerio. Las autoridades dijeron que 24 personas fueron arrestadas y 17 detenidas para ser interrogadas en las 2.000 concentraciones organizadas, del que sumaban este mediodía 124.000 participantes.

Las protestas por la subida de los impuestos que gravan los combustibles concentraron el malestar de los franceses por una serie de problemas como la caí­da del poder adquisitivo.

Los manifestantes bloquearon algunas gasolineras y acceso de peajes en autopistas y la policía tuvo que intervenir lanzando gases lacrimógenos en una concentración en Alta Saboya (sureste).

Las autoridades abrieron una investigación sobre la muerte registrada en Pont-de-Beavoisini, la región oriental de Saboya. Se trata de una mujer, de unos 60 años que falleció luego de que un conductor, que aparentemente entró en pánico al verse atrapado en la protesta, aceleró y golpeó a la mujer, dijo un funcionario regional.

Por el momento no habí­a más datos sobre el estado de los otros 47 heridos en las protestas. Entre los afectados se encuentra un policía en Grasse, al sureste de Francia.

La subida arancelaria forma parte de la estrategia de Macron para aliviar la dependencia del paí­s de los combustibles fósiles. Muchos conductores los ven como emblemáticos de una presidencia que consideran desconectada con las dificultades económicas de la población.

Los manifestantes se hacen llamar "chalecos amarillos" porque van vestidos con los chalecos fluorescentes que todos los conductores franceses deben llevar por ley en sus autos por si ocurre un accidente.

Muchos de estos manifestantes viven zonas urbanas alejadas de las grandes aglomeraciones francesas y aseguran que el coche es su único medio de transporte.

Por otra parte, ambulancias bloquearon brevemente la avenida de los Campos Elí­seos, en el centro de Parí­s, el viernes para protestar por las nuevas normas sobre el financiamiento del servicio y aumentar la presión sobre el ejecutivo de Macron.