Al menos tres personas han fallecido, entre ellos el atacante, y otras tantas han resultado heridas en la mañana de jueves (hora local) por un tiroteo en el distrito financiero de la ciudad de Auckland, en el norte de Nueva Zelanda.

El agresor, un joven de 24 años que llevaba un brazalete electrónico, ingresó en torno a las 7.00 horas en una zona en construcción y comenzó a disparar contra las personas que se encontraban en la parte baja de la instalación, lo que obligó a la intervención de la policía.

Al sitio del suceso acudió un importante número de policías, que acordonó la zona, además del despliegue de un helicóptero para apoyar la labor en tierra.

El delincuente se movió por distintos sectores de la construcción disparando su arma de fuego y al acceder a los niveles superiores del edificio se atrincheró en un ascensor donde se produjo el enfrentamiento con la policía y que terminó por acabar con su vida.

Las autoridades policiales de Auckland señalaron que se investigan los hechos y que continuará actualizando las informaciones sobre las personas heridas. “Lo que se ha desarrollado es comprensiblemente alarmante y estamos asegurando al público que este incidente ha sido contenido y es un incidente aislado”, indicaron en Twitter.

Agregaron que “también podemos advertir que esto no es un riesgo para la seguridad nacional”.

Un agente de policía se encuentra entre los heridos, que según los cuerpos de seguridad son “múltiples”, si bien fuentes sanitarias han cifrado en seis los heridos, de acuerdo al reporte del diario neozelandés ‘New Zealand Herald’.

Las autoridades locales hicieron un llamado a la población para que se mantenga alejada de la zona del tiroteo. El primer ministro de Nueva Zelanda, Chris Hipkins, ha cancelado su agenda y ha programado una rueda de prensa para brindar más detalles sobre lo ocurrido.