Fue un golpe de efecto en la política argentina. Este sábado, la senadora Cristina Fernández de Kirchner anunció de sorpresa que no buscará volver a la presidencia, pero sí quiere ser la compañera de fórmula de Alberto Fernández, el exjefe de Gabinete de su esposo, Néstor Kirchner (2003-2007), y con quien había mantenido distancia luego de que éste renunciara a su puesto en la Casa Rosada en 2008.

La decisión se concretó este jueves 16 en el edificio Uruguay 1306 de la capital trasandina. Un día antes, Cristina K le propusó ser vicepresidenta a Fernández y él aceptó. Finalmente el anuncio fue hecho este sábado, dejando a muchos sorprendidos con la noticia, dado que se daba prácticamente por descontado que la expresidenta repostularía al cargo.

De acuerdo al diario argentino La Nación, el lunes el exdiputado se hará parte de una actividad de campaña en Santa Cruz, la provincia que históricamente ha sido el bastión del kirchnerismo, y el día martes 21 de mayo acompañará a la exmandataria a tribunales para el inicio del juicio oral contra ella por presunto lavado de activos

Incluso, Fernández fue parte de una actividad política junto al hijo del matrimonio Kirchner, Máximo, y algunos intendentes peronistas en Lomas de Zamora hace algunos días.

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¿Quién es Alberto Fernández?

"Cristina me llamó a la facultad el miércoles y me dijo que me quería ver". Lo relató así, directo, pero es el inicio de uno de los capítulos políticos más llamativos de la siempre sorprendente política argentina. Alberto Fernández, abogado y profesor de Derecho en la Universidad de Buenos Aires (UBA), regresa por la puerta ancha y como protagonista de la mano de quien fuera por años su principal blanco de críticas, Cristina Fernández de Kirchner.

Pero Fernández es un histórico, alguien que se podría describir como del "riñón" del kirchnerismo. La propia Cristina lo recordó en el video en que anunció la inesperada decisión de que ella competirá en las elecciones, pero como vicepresidenta de quien fuera su jefe de gabinete y el de su esposo, Néstor Kirchner. "Alberto, a quien conozco hace más de 20 años, y con quien tuvimos también diferencias...", señalaba la exmandataria, sin obviar un punto que será relevante: los reproches que abiertamente le hizo Fernández a su gestión y su liderazgo tras renunciar a su puesto en 2008, en medio de una dura crisis que enfrentaba a la mandataria con el sector agrario.

"En el tercer (segundo) mandato de Cristina es dificilísimo encontrar algo virtuoso. He hecho un enorme esfuerzo: lo único virtuoso que tuvo el último mandato es el desarrollo en ciencia y tecnología", aseguró en una entrevista en 2015 con el programa de TV Animales Sueltos. Y, más aún, la acusó derechamente de mentir. "Cristina tiene una enorme distorsión sobre la realidad, francamente lo digo. Si Cristina revisa las cosas que dijo, debería rectificarse un montón de cosas. Llegó a decir que Alemania estaba peor que nosotros en materia de pobreza", planteaba.

No siempre había sido así. Cuando el entonces gobernador de Santa Cruz Néstor Kirchner llegó a la Casa Rosada en 2003, convirtió a Fernández -por entonces una figura joven y promisoria, que había sido electo diputado en 2000, pero que no estaba en los principales círculos de poder- en su mano derecha.

Ahí, el abogado lograría un hito: mantenerse durante todo su período en ese puesto, e incluso mantenerse en él en la parte inicial del primer gobierno de Cristina. Eso, hasta que en julio de 2008 dejó el cargo y se distanció.

La relación no se recompuso ni siquiera con la muerte de Néstor Kirchner en 2010. Sólo fue el año pasado cuando Cristina y Alberto Fernández comenzaron su sorpresivo acercamiento. Incluso Cristina señaló durante la presentación de su libro Sinceramente hace unos días, que fue Alberto Fernández quien le dio la idea de empezar a escribir. "Él vino y me dijo que le angustiaban las cosas que decían de mi, de Néstor, de los chicos, de nuestra vida, de nuestra relación", y con ello, nació la idea de plasmar en el papel sus ideas", aseguró sobre el texto, un éxito de ventas en Argentina con más de 250 mil copias vendidas.

Entre sus lazos con Chile, destaca la cercana relación que mantiene con exsenador del PS, Carlos Ominami, con quien compartió el pasado 20 de abril durante su visita Santiago para participar del estreno del documental Al Fondo a la Izquierda del excandidato presidencial, Marco Enríquez-Ominami.

Ahora, Alberto Fernández busca convertirse en el nuevo titular de la Casa Rosada de cara a los comicios se que celebran el 27 de octubre en Argentina, donde el actual presidente Mauricio Macri intentará continuar en la presidencia.