Tras cuatro años de macrismo, Argentina volverá al kirchnerismo. En unas elecciones que finalmente no fueron reflejo de las primarias de agosto, Alberto Fernández, el ex jefe de gabinete de los Kirchner, se imponía de manera cómoda al Presidente Mauricio Macri, que veía frustrada su reelección. La gran apuesta del mandatario centroderechista era forzar un balotaje, pero Fernández con el 97,14% de los votos escrutados lo derrotó con un 48,1% frente a un 40,37%. En Argentina basta con superar un 45% para evitar una segunda vuelta.

La fórmula del Frente de Todos, se imponía en una elección que sus seguidores tildaban de "histórica". Esto, porque Cristina Fernández deberá asumir como Vicepresidenta, una fórmula que en un comienzo provocó sorpresa, pero que los analistas coinciden en que fue determinante para el triunfo de Alberto Fernández.

"¡Presidente, Alberto Presidente!" y "¡Va a volver!", gritaron los cientos de seguidores que se agolparon desde las 17:00 -una hora antes del cierre de mesas- en el comando de Fernández, ubicado en el barrio de Chacarita, para ovacionarlo y celebrar el triunfo, junto a Cristina y Axel Kicillof, este último candidato a gobernador de la provincia Buenos Aires y que esta noche también está logrando un triunfo frente al macrismo en ese bastión.

El mensaje de Néstor

El ambiente en el lugar, que estaba colmado de entusiastas adherentes, era de nerviosismo en un principio, sin embargo, con el correr de las horas se volvió más distendido y los asistentes de a poco comenzaron a celebrar a la espera de que llegara la dupla Fernández-Fernández.

Afuera del búnker, otras miles de personas celebraron frente a un escenario dispuesto para que Alberto y Cristina saludaran a sus seguidores.

Se trató de una jornada especialmente emotiva para el sector, puesto que hace nueve años falleció Néstor Kirchner, de quien Fernández fue un íntimo amigo. Por eso, desde temprano, antes de votar, Alberto demostró su emoción ante a la importancia de este día. "Néstor me diría 'hacé lo que tenés que hacer, que yo te acompaño'", dijo.

El abogado de 60 años llegó a votar a eso del mediodía en Puerto Madero, tras haber paseado tranquila y relajadamente a su perro Dylan. Macri hizo lo suyo a la misma hora en el barrio Recoleta.

Cuatro años bastaron para que el peronismo pudiera renovar la confianza de los argentinos, tras 12 años de gobiernos kirchneristas (2003-2015) de la mano de Néstor y Cristina, pese a los numerosos casos de corrupción a la que se han visto enfrentados decenas de exfuncionarios K, incluida la expresidenta y futura vicepresidenta, Cristina Fernández.

Las cifras económicas del gobierno de Macri facilitaron las opciones para Alberto Fernández. La caída de la economía que se produjo en el mandato de Macri se ha visto reflejada en una alta inflación de 53,5% interanual, un desempleo de 10,6%, y una pobreza del 35,4% de la sociedad (uno de cada tres argentinos). De hecho, una de sus principales promesas de gobierno fue reducir la pobreza, sin embargo y por el contrario, aumentó.

Además, a mediados de julio de 2018, Macri tuvo que recurrir al Fondo Monetario Internacional por un préstamo de US$ 57 millones. A cambio del préstamo, el gobierno argentino debía instalar una política fiscal y monetaria más estrictas. La decisión se tomó luego de que por varios días la decisión del dólar subiera a niveles récord, y no había cómo controlarlo.

Tras el cierre de las mesas, en el círculo de Macri hubo cautela a la espera de las cifras oficiales. "Mañana estaré trabajando temprano en la Rosada por el futuro de los argentinos", dijo Macri en declaraciones luego de votar.

Además, se eligieron 130 bancas para la Cámara de Diputados y 24 senadores, en donde también el peronismo obtuvo mayoría.