El viernes las ONGs SOS Mediterránee y Médicos sin fronteras lograron rescatar cerca de 141 migrantes en aguas internacionales cerca de Libia, sin embargo, no hay quien quiera recibir a las personas, y a pesar, que los rescatados están a salvo todavía está pendiente conocer su destino.

Las personas a bordo del Aquarius - la misma embarcación que fue recibida por España, luego de que Italia y Malta se negaran a recibir a los migrantes y refugiados - navegaban en barcas pequeñas desde Libia rumbo a Italia. A bordo de ellas, habían al menos 67 menores sin ningún adulto que los acompañe y otros seis niños que están acompañados con al menos uno de sus progenitores.

El grupo fue rescatado en un operativo en conjunto con el gobierno de Libia, y ya llegan dos días navegando sin rumbo y no hay un puerto que se haya ofrecido a recibirlos.

Durante este fin de semana, el presidente español Pedro Sánchez de reunirá con su par alemana, la canciller Angela Merkel para discutir este tema. Ahí esperar encontrar una solución a la cantidad de migrantes que llegan a sus costas y esperan que Francia y Portugal se sumen a los puertos que permiten el ingreso de migrantes.