Decenas de miles de personas se manifestaron este lunes en Buenos Aires para conmemorar el 20 aniversario de la rebelión popular que en 2001 barrió al gobierno de Fernando de la Rúa en medio de la peor crisis económica de este país.

La Plaza de Mayo fue el epicentro de los homenajes y tributos a los 39 muertos por la represión policial de aquellas jornadas. A lo largo del día participaron en las manifestaciones sindicatos, organizaciones sociales y estudiantiles y partidos políticos.

“El pueblo le recuerda otra vez a los políticos que tiene memoria y sabe de su poder, pero también les advierte: los vigilamos”, dijo a la AFP Sergio Abate, de 46 años, que en 2001 se manifestó y lanzó piedras al Congreso al grito de “que se vayan todos”, según rememoró.

El 20 de diciembre de 2001, el entonces presidente, el conservador Fernando de la Rúa (1999-2001), renunció y huyó de la Casa Rosada en helicóptero ante la presión popular.

Antes había promovido la confiscación de los depósitos bancarios, lo que desató la furia de la clase media y un estallido social con protestas, saqueos y enfrentamientos con la policía.

Entre banderas argentinas y consignas como “el pueblo tiene memoria”, nutridas columnas de manifestantes coparon la plaza frente a la sede gubernamental.

Allí cayeron cinco de los 39 muertos que dejó la represión de 2001. 48 horas de caos en todo el país, una crisis que derivó en el mayor “default” de la historia por unos 100.000 millones de dólares.

“Argentinazo”

Familiares y amigos de las víctimas les rindieron tributo uniendo en caravana los puntos de la ciudad de Buenos Aires donde fueron abatidos.

En la marcha también se escucharon cánticos contra el Fondo Monetario Internacional, en momentos en que el gobierno del peronista de centro-izquierda Alberto Fernández negocia con el organismo un nuevo crédito que reemplace el préstamo por 44.000 millones de dólares que tomó su antecesor, el liberal Mauricio Macri (2015-2019).

“El 20 de diciembre es un día muy importante, hace 20 años de la gran crisis que terminó con una poblada inmensa aquí en Plaza de Mayo”, dijo Gabriel Solano, del Partido Obrero.

El dirigente subrayó que la crisis también tiene su correlato en el presente: “Hoy recordamos ese aniversario llenando la Plaza de Mayo con un planteamiento que es ‘No al pacto con el FMI’ porque no queremos más ajuste para el pueblo, porque si no vamos a volver al camino que nos llevó al 2001, una gran crisis”, opinó.

Fernández ha reiterado que el acuerdo que negocia con el FMI no incluirá un ajuste. “La Argentina del ajuste es historia, no hay más posibilidades de que ello ocurra”, dijo semanas atrás el mandatario cuando el organismo reportó “avances” en las negociaciones.

El telón de fondo es una economía que crecerá 10% este año tras caer 9,9% en 2020, pero jaqueada por una de las tasas de inflación más altas del mundo (45,4% de enero a noviembre), 9,6% de desocupación y con 40% de la población que vive en la pobreza.

Lito Borello, del Movimiento Popular Los Pibes, consideró que el estallido de 2001 “fue un ‘argentinazo’ que marcó a fuego la resistencia popular a las políticas neoliberales”.

“Nuestro pueblo terminó echando al presidente por el patio trasero y hay un aprendizaje, los pueblos, como dice el papa Francisco, ya no esperan, se unen, se organizan y luchan. Si bien venimos a recordar también venimos a celebrar la lucha de un pueblo que camina hacia su liberación”, destacó.