Armenia tiene “pruebas” de que Turquía apoya militarmente a las tropas azerbaiyanas en Nagorno Karabaj, declaró el primer ministro armenio, Nikol Pachinian, en una entrevista que el periódico francés Le Figaro publica el viernes.
Pashinian acusa a Turquía de apoyar al ejército azerbaiyano con aviones de combate, drones y otro tipo de equipo militar, y de haber enviado a asesores militares y a “mercenarios y terroristas” a Nagorno Karabaj, un territorio separatista donde azerbaiyanos y armenios se enfrentan desde el domingo.
“Tenemos pruebas”, aseguró el primer ministro armenio. “Usan drones y (aviones de combate) F-16 turcos para bombardear zonas civiles en Nagorno Karabakh”, afirmó.
“La comunidad internacional, especialmente la opinión pública estadounidense, debe saber que los F-16 fabricados en Estados Unidos se están usando actualmente para matar a armenios en este conflicto”, dijo Pachinian.
“Hay pruebas”, insistió, “de que comandantes militares turcos están directamente implicados en la dirección de la ofensiva”.
“Ankara suministró a Bakú vehículos militares, armas, así como a asesores militares. Sabemos que Turquía entrenó y transportó a miles de mercenarios y terroristas desde zonas ocupadas por los turcos en el norte de Siria”, declaró. “Estos mercenarios y terroristas combaten en la actualidad contra los armenios”, dijo.
“Camino genocida”
El presidente francés, Emmanuel Macron, mencionó este viernes la injerencia en el conflicto de cientos de yihadistas que se fueron de Siria rumbo al territorio separatista, transitando por Turquía.
Macron dijo que pedirá “explicaciones” sobre este tema al Presidente turco, Recep Tayiip Erdogan. “Se ha traspasado una línea roja” y “es inaceptable”, declaró durante la cumbre de la Unión Europea en Bruselas.
Pachinian consideró en su entrevista con Le Figaro que Turquía es “absolutamente” responsable de la escalada militar en Nagorno Karabaj.
“Lo que quiere Turquía es reforzar su papel e influencia en el sur del Cáucaso, y modificar así el status quo que ha estado en vigor desde hace más de un siglo”, estima. “Persigue el sueño de construir un imperio que imite al sultanato y se embarca en un camino que podría incendiar la región”.
Pachinian reiteró que para Armenia la idea de un alto el fuego es actualmente prematura. Nagorno Karabaj, un territorio separatista poblado mayoritariamente por armenios y apoyado por Armenia, “no puede desarmarse porque esto conduciría a un genocidio”, estimó.
Pachinian se refirió a “lo que sucedió en 1915, cuando más de 1,5 millones de armenios fueron masacrados durante el primer genocidio del siglo XX”. Según él, “el Estado turco, que sigue negando el pasado, se aventura de nuevo por un camino genocida”.