El balance de palestinos muertos a causa de la ofensiva militar desatada por Israel contra la Franja de Gaza hace meses tras los ataques del 7 de octubre ha superado ya los 38.400 mientras que la cifra de heridos se acerca a los 88.500, según han indicado este sábado las autoridades del enclave, controladas por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas).
El Ministerio de Sanidad gazatí ha precisado que hasta la fecha se han confirmado 38.382 “mártires” y 88.352 heridos, al tiempo que ha manifestado que las tropas israelíes “han cometido cuatro masacres” durante las últimas 24 horas, con un balance de 61 muertos y 129 heridos.
Además, ha dicho que “hay varias víctimas bajo los escombros y en las carreteras” y ha agregado que “los equipos de ambulancias y de defensa civil no pueden llegar hasta ellas”. Las autoridades gazatíes han señalado que alrededor de 10.000 personas se encuentran desaparecidas, por lo que el balance de fallecidos podría ser muy superior al anunciado oficialmente.
Estas cifras no incluyen las de ataque de las Fuerzas Armadas israelíes de esta mañana contra un campo de desplazados en Al Mawasi en el que han muerto al menos 71 civiles y otros 289 han resultado heridos. Israel ha informado de que el objetivo del ataque eran el comandante de las milicias de Hamas en Gaza, Mohamed Deif, y el comandante local de Hamás en la ciudad de Jan Yunis, próxima al campamento, Rafa’a Salamé.
El Ejército de Israel desencadenó su ofensiva contra la Franja tras los citados ataques del 7 de octubre, que dejaron unos 1.200 muertos y cerca de 240 secuestrados. A estos balances de víctimas se suman más de 560 palestinos muertos en Cisjordania y Jerusalén Este en operaciones por parte de las fuerzas israelíes o en ataques perpetrados por colonos.