La información fue confirmada por la prensa estatal siria. Insurgentes habrían atacado con explosivos un pueblo en manos del gobierno sirio en el noroeste del país matando a cinco niños y una mujer.

La televisión estatal dijo que los bombardeos causaron un gran daño material a la ciudad de Suqailabiyah.

La agencia estatal de noticias SANA informó que las tropas sirias respondieron disparando proyectiles contra las posiciones de los insurgentes en el extremo sur de la provincia de Idlib, el último bastión rebelde importante en el país.

Hayat Tahrir al-Sham, vinculado a Al-Qaida, es el principal grupo insurgente en el área.

El enclave ha sido sacudido por una ola de violencia desde el 30 de abril, matando e hiriendo a decenas y obligando a unas 150.000 personas a huir de sus hogares en áreas controladas por los rebeldes.

Las tropas sirias han estado a la ofensiva avanzando con ataques aéreos durante días, capturando varias ubicaciones y pueblos estratégicos.