Cuando la guerra en Medio Oriente entra en su tercer día, se confirmó que al menos 900 israelíes murieron y casi 2.400 resultaron heridos desde la invasión de Hamás en Israel el sábado por la mañana. Mientras que en la Franja de Gaza, los palestinos informan de 680 muertos y más de 2.700 heridos.
En un discurso televisado este lunes, el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, dijo que “estamos en el tercer día de la guerra por nuestra propia existencia, una que ganaremos”.
Netanyahu señaló que “Hamás es lo mismo que ISIS, y lo combatiremos de la misma manera que lo combatieron otros países del mundo. Siempre hemos sabido lo que era Hamás, y ahora el mundo también lo sabe. Permítanme decirlo claramente: sólo hemos empezado a actuar contra Hamás”.
Es así como una andanada de cohetes llegaron a la zona de Jerusalén el lunes por la tarde, con varios impactos directos en Beitar Illit, Monte Adar y Abu Gosh. Así como en Belén; según informes, ocho personas resultaron heridas en los ataques, tres de ellas en estado de gravedad.
Al mismo tiempo, en el norte, el Mando del Frente Interior ordenó a los residentes de docenas de comunidades cercanas a la frontera con Líbano que entraran en sus habitaciones de protección hasta nuevo aviso.
Al menos dos personas resultaron gravemente heridas cuando cayeron cohetes en Ashkelon en andanadas que tuvieron como objetivo zonas tan septentrionales como las llanuras costeras, en Tel Aviv y sus alrededores, en las llanuras centrales y en Jerusalén.
En tanto el ejército israelí, han confirmado un total de 130 militares y policías muertos durante la ofensiva, según el último balance.
Por otra parte, desde la Franja de Gaza, el Ministerio de Sanidad, controlado por Hamás, ha informado a última hora de este lunes de que “los equipos médicos de los hospitales han recibido a 687 mártires, entre ellos 140 niños, 105 mujeres y 3.726 heridos con diversas lesiones”, explicó el el Ministerio. Además, destacó que “el 10% de los heridos son niños”.
El balance denuncia las “masacres” de 13 familias en las que murieron 105 personas y ha advertido de que “un gran número de víctimas se encuentran todavía bajo los escombros”.
El Ministerio ha denunciado además “los ataques directos contra instalaciones médicas y civiles”, así como los ataques contra once ambulancias. “Han sido atacados siete hospitales y centros de salud”, ha explicado el Ministerio de Sanidad.
Además, el Hospital Beit Hanun, el único de la ciudad, ha quedado fuera de servicio como consecuencia de los “repetidos ataques” en las inmediaciones del centro sanitario que “hacían imposible que los equipos entraran y salieran del mismo”.