Las Fuerzas de Defensa de Israel informaron este lunes que estaba atacando objetivos en el Líbano después que Hezbolá lanzó un “ataque de advertencia defensivo” contra una posición militar del Estado judío en la disputada zona de las Granjas de Shebaa, territorio reclamado tanto por Beirut como por Damasco, pero que permanece bajo control judío desde 1967.
El mando militar israelí reiteró que los ataques de Hezbolá “constituyen una violación del acuerdo de alto el fuego” entre Israel y Líbano, mientras que ha exigido a las autoridades libanesas a “impedir” las “actividades hostiles” de la milicia.
Los residentes de Beirut dijeron que oyeron drones volando a última hora de la tarde, mientras la agencia de noticias oficial del Líbano informaba que Israel había renovado los ataques en el sur del Líbano.
El intercambio de disparos puso el alto el fuego negociado por Estados Unidos entre ambos en una posición cada vez más frágil, menos de una semana después de su entrada en vigor.
La tregua prohíbe a Israel realizar operaciones militares ofensivas en el Líbano y exige que el Líbano impida que los grupos armados, incluido Hezbolá, lancen ataques contra el Estado judío.
El Ejército israelí no informó de víctimas en los dos lanzamientos de misiles de Hezbolá, pero el primer ministro, Benjamin Netanyahu, prometió una respuesta “enérgica”.
Líbano y Hezbolá acusan a Israel
Hezbolá dijo que el lanzamiento de cohetes, la primera operación que el grupo anunció desde que entró en vigor el alto el fuego el miércoles, fue en represalia por las reiteradas violaciones israelíes de la tregua.
Entre las víctimas de este lunes se encuentra una persona que murió en un ataque aéreo israelí en la ciudad de Marjayoun, en el sur del Líbano, a unos 10 kilómetros de la frontera con Israel, indicó el Ministerio de Salud local.
Además, un dron israelí mató a un miembro de las fuerzas de seguridad libanesas, mientras estaba de servicio en Nabatieh, a 12 kilómetros de la frontera, que la Dirección General de la Seguridad del Estado calificó como una “flagrante violación” de la tregua.
“Este ataque constituye una escalada peligrosa y una violación flagrante de la soberanía libanesa, y confirma el carácter agresivo de la ocupación, que no respeta ningún acuerdo o pacto internacional”, señaló en un comunicado.
El presidente del Parlamento libanés, Nabih Berri, un aliado de Hezbolá que negoció la tregua en nombre del Líbano, dijo este lunes que Beirut había observado al menos 54 violaciones del alto el fuego por parte de Israel desde el miércoles.
El lunes hubo operaciones letales, y las autoridades libanesas afirmaron que los ataques israelíes en el sur del Líbano mataron al menos a dos personas.
Anteriormente, la agencia de noticias oficial del Líbano, NNA, dijo que las fuerzas israelíes dispararon dos proyectiles de artillería hacia la ciudad de Beit Lif, en el distrito de Bint Jbeil, al sur del Líbano, mientras que un intenso fuego de ametralladora apuntaba a Yaroun.
No se reportaron heridos en ninguno de los incidentes, dijo la agencia, pero un ataque israelí separado hirió a otras personas en la ciudad de Talousa, en el sur del Líbano.
Berri instó al comité encargado de supervisar la tregua a garantizar “urgentemente” que Israel ponga fin a sus violaciones.
