“Los números muestran un aumento preocupante”, dijo el ministro de Salud, Jens Spahn, en una rueda de prensa este miércoles en Berlín, en la que pidió no estropear los logros conseguidos hasta ahora por Alemania en su lucha contra la pandemia, que convirtieron al país en una de las naciones de Europa menos afectadas.
Según datos oficiales difundidos ayer por las autoridades, Alemania registró cuatro mil nuevos casos diarios, una cifra que no se daba desde el 11 de abril. El ministro dijo estar preocupado por el “alarmante” aumento de contagios.
El alza también inquieta a los virólogos, que recalcaron la importancia de no perder el control de la pandemia. “La situación actual me preocupa mucho, no sabemos cómo va a evolucionar en las próximas semanas. Es posible que veamos más de 10 mil contagios diarios. Es posible que el virus se propague de manera descontrolada”, advirtió el presidente del Instituto Robert Koch, Lothar Wieler, en la misma conferencia de prensa.
Pese al oscuro pronóstico, el virólogo se mostró esperanzado de que los 4.058 casos que habían sido registrados en las últimas 24 horas “no se conviertan en algo logarítmico”.
Spahn, por su parte, señaló que con el aumento de contagios crece también la incertidumbre entre la población. Pese a que descartó volver a un confinamiento general, no rechazó por completo la idea de aplicar medidas localizadas, para situaciones concretas.
Aunque el ministro de Salud destacó que su país “ha sobrellevado bien la crisis” y el sistema sanitario alemán no se ha visto colapsado, “aun con todo el optimismo, las cifras me preocupan mucho”.
"Tenemos que evitar que el número de infectados crezca de manera exponencial, que se llegue a un punto en la pandemia en el que perdamos el control”, advirtió Spahn.
El número de muertos, de pacientes en unidades de cuidados intensivos y de aquellos con respiración asistida, en tanto, es “comparativamente bajo”, por lo que las autoridades piensan que el sistema de salud puede manejar la situación actual sin problemas.
Spahn también se refirió a Berlín, donde cuatro barrios superaron los 50 nuevos contagios por 100 mil habitantes en una semana. “La situación en la capital muestra cómo un manejo despreocupado de la pandemia y en parte una actitud de ignorarla puede conducir rápidamente a una evolución diferente”, dijo.
Nuevas medidas
En la misma línea, los estados federados y el gobierno acordaron que los ciudadanos residentes en regiones con alta incidencia de contagios deberán presentar un test negativo -realizado máximo 48 horas previas al viaje- para hospedarse en cualquier otra zona del país.
Además, las autoridades han recordado a la población las tres reglas básicas, que son el distanciamiento, las medidas de higiene y las mascarillas, sobre todo de cara al invierno europeo. Así, recomiendan además ventilar los recintos cerrados y usar la aplicación móvil de rastreo, medidas que podrían contribuir sustancialmente a reducir los contagios.
El total de positivos desde que se dio a conocer el primer caso a fines de enero casi está cercano a los 315 mil, mientras que las muertes superan las nueve mil. El peak de contagios se había registrado entre finales de marzo y principios de abril, con más de seis mil nuevos casos diarios.