En un incidente que pone de relieve las crecientes tensiones entre Estados Unidos y Rusia por la guerra que libra el Kremlin en Ucrania, un caza Su-27 de la Fuerza Aérea rusa interceptó este martes un dron de vigilancia norteamericano sobre sobre aguas internacionales del Mar Negro y golpeó la hélice de esta última nave, obligando a su derribo. Así lo dio a conocer el Mando Europeo de Estados Unidos (EUCOM), responsable de las operaciones militares norteamericanas en la región, que calificó el episodio de “inseguro y poco profesional”.
La colisión ocurrió alrededor de las 8:03 a.m. hora central europea e involucró a dos aviones de combate rusos Su-27 y un dron MQ-9 Reaper, según el comunicado. Se cree que el Su-27 ruso aterrizó en una base aérea en la Crimea ocupada, indicó el diario The Guardian, que agregó que un dron MQ-9 Reaper puede costar hasta 32 millones de dólares.
“Nuestra aeronave MQ-9 estaba realizando operaciones de rutina en el espacio aéreo internacional cuando fue interceptado y golpeado por un avión ruso, lo que derivó en un accidente y en la pérdida total del MQ-9″, explicó el comandante James B. Hecker, que advirtió: “Este acto inseguro y poco profesional de los rusos casi provocó que ambos aviones se estrellaran”.
“Varias veces antes de la colisión, los Su-27 arrojaron combustible y volaron frente al MQ-9 de una manera imprudente, poco profesional y poco ecológica”, dice el comunicado. “Este incidente demuestra una falta de competencia, además de ser inseguro y poco profesional”.
Hecker instó a las fuerzas rusas a comportarse de manera “profesional y segura” en la zona, en la medida en que Estados Unidos y sus aliados “seguirán operando en el espacio aéreo internacional”. En este sentido, Washington denunció “un patrón de acciones peligrosas” por parte de pilotos de Rusia, en un momento especialmente delicado por la escalada de tensiones en torno a Ucrania.
John F. Kirby, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, dijo que el Presidente Joe Biden fue informado sobre el incidente, indicó el diario The New York Times.
Poco después, el Ministerio de Defensa ruso negó cualquier contacto de sus cazas con el dron de vigilancia de EE.UU., asegurando que el MQ-9 perdió el control tras realizar una brusca maniobra, perdiendo altitud hasta estrellarse en el agua, según consigna Russia Today. Moscú también denunció que el dron estadounidense violó las restricciones temporales impuestas al uso del espacio aéreo sobre el Mar Negro.
“Como resultado de maniobras bruscas alrededor de las 9:30 a.m., hora de Moscú, el vehículo aéreo no tripulado MQ-9 entró en vuelo descontrolado, perdió altitud y chocó con la superficie del agua. Los combatientes rusos no usaron armas, no entraron en contacto con el UAV (vehículo aéreo no tripulado) y regresaron sanos y salvos a su base de operaciones”, dijo el Ministerio de Defensa ruso en un comunicado.
Desde la invasión rusa de Ucrania en febrero de 2022 aumentaron las tensiones entre Moscú y Washington: la Armada rusa ha controlado el Mar Negro, bloqueando el acceso a los barcos ucranianos, indicó el diario estadounidense. Sin embargo, Kiev ha podido exportar su grano a través del Mar Negro en virtud de un acuerdo firmado en julio pasado entre los dos países en guerra.