La ONU dijo el viernes que al menos 7 mil personas han sido "supuestamente" detenidas en Irán desde que estallaran las masivas protestas el mes pasado y llamó a la liberación inmediata de los detenidos de manera arbitraria.
En un comunicado, la oficina para los Derechos Humanos de la ONU señaló que había obtenido "imágenes de video verificadas" en las que se ven a las fuerzas de seguridad disparando contra manifestantes, aparentemente con la intención de matar.
La oficina añadió que había "informaciones que sugieren que al menos 208 personas murieron" durante los disturbios, lo que respalda un balance anterior dado por Amnistía Internacional.
"También hay informaciones, que la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos no ha podido verificar hasta ahora, que sugieren más del doble de ese número de muertos", añade el comunicado.
La Alta Comisionada para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, dijo que videos obtenidos por su oficina muestran "uso de severa violencia contra los manifestantes".
"También hemos recibido imágenes que parecen mostrar a las fuerzas de seguridad disparando por la espalda a manifestantes desarmados mientras estos huían y disparando a otros directamente en la cara y órganos vitales. En otras palabras disparando a matar", añadió Bachelet.
En otras imágenes de videos se ve a "miembros armados de las fuerzas de seguridad disparando desde el tejado de un edificio del departamento de justicia" en la ciudad de Javanrud, al oeste de Teherán, en la provincia de Kermanshah. También se observan disparos desde helicópteros en Sadra, en la provincia de Fars.
Las protestas en Irán comenzaron el 15 de noviembre después de un aumento inesperado del precio de la gasolina.
La República Islámica aún no ha divulgado cifras del número de muertos o detenidos durante la represión de los disturbios, en los que se quemaron edificios y se saquearon comercios.
"Exhorto a las autoridades a liberar inmediatamente a todos los manifestantes que han sido arbitrariamente privados de su libertad", continuó Bachelet.
Irán ha responsabilizado de la violencia que estalló durante las protestas a "matones" respaldados por sus enemigos, Estados Unidos, Israel y Arabia Saudita, y ha calificado el balance de muertos dado por fuentes extranjeras de "mentiras absolutas".