El Presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo que la democracia está amenazada en su país y en el extranjero y calificó de inaceptable la postura del expresidente Donald Trump sobre la OTAN el jueves, en un discurso sobre el Estado de la Unión diseñado para contrastar visiones con su oponente republicano en la elección de 2024.
Biden, ante una sesión conjunta de la Cámara de Representantes y el Senado, abrió su intervención con una crítica directa a Trump por unos comentarios en los que invitaba al presidente ruso, Vladimir Putin, a invadir otras naciones de la OTAN si no gastaban más en defensa.
“Ahora mi predecesor, un expresidente republicano, le dice a Putin, cito: ‘Haz lo que quieras’”, dijo Biden. “Creo que es indignante, peligroso e inaceptable”.
Biden, que ha estado presionando al Congreso para que proporcione financiación adicional a Ucrania para su guerra con Rusia, también tuvo un mensaje para Putin: “No nos alejaremos”, dijo.
El presidente estableció un contraste con Trump, su rival republicano en las elecciones del 5 de noviembre, sobre la democracia, el derecho al aborto y la economía durante un discurso que los demócratas ven como una oportunidad de alto perfil para que Biden presione su caso para un segundo mandato frente a una audiencia televisiva poco común de millones de estadounidenses.
Biden, que sufre de bajos índices de aprobación, se enfrenta al descontento entre los progresistas de su partido por su apoyo a Israel en su guerra contra Hamas y de los republicanos por su postura sobre la inmigración.
Algunos legisladores llevaban insignias de alto el fuego en señal de protesta, pero muchos corearon “¡Cuatro años más!” cuando Biden entró en la cámara.
Varias legisladoras del público vestían de blanco para promover los derechos reproductivos.
Biden destacó las amenazas a la democracia que, según él, supone Trump, ya que el expresidente repite afirmaciones falsas sobre su derrota en las elecciones de 2020 y propone encarcelar a los enemigos políticos.
“Mi vida me ha enseñado a abrazar la libertad y la democracia. Un futuro basado en los valores fundamentales que han definido a Estados Unidos: honestidad, decencia, dignidad, igualdad”, dirá Biden, según extractos del discurso publicados con antelación. “Ahora algunas personas de mi edad ven una historia diferente: una historia americana de resentimiento, venganza y retribución. Ese no soy yo”.
Trump, que se enfrenta a múltiples cargos criminales mientras busca la reelección, dice que planea castigar a los enemigos políticos y deportar a millones de migrantes si gana un segundo mandato en la Casa Blanca.
Edad y economía en juego
Los sondeos de opinión muestran a Biden, de 81 años, y a Trump, de 77, muy igualados en la carrera. La mayoría de los votantes estadounidenses no están entusiasmados con la revancha después de que Biden derrotó a Trump hace cuatro años.
La referencia del presidente a “otras personas de mi edad” es un intento de subrayar que los dos hombres son mayores. No se esperaba que Biden, que se ha enfrentado a preocupaciones sobre su agudeza mental, mencionara por su nombre a Trump, que también comete metidas de pata y deslices verbales con regularidad.
El discurso puede ser el mayor escenario del presidente demócrata para llegar a los votantes que sopesan si votar por él, elegir a Trump o no participar en las elecciones. Nikki Haley, la última rival que le quedaba a Trump por la nominación presidencial de su partido, abandonó la carrera el miércoles.
Biden trató de pulir su reputación entre los estadounidenses sobre la fortaleza de la economía de Estados Unidos y renovar su búsqueda de hacer que los estadounidenses ricos y las empresas paguen más impuestos, dando a conocer propuestas que incluyen impuestos mínimos más altos para las empresas y los estadounidenses con una riqueza superior a 100 millones de dólares.
Es improbable que se apruebe una reforma fiscal de este tipo a menos que los demócratas obtengan una amplia mayoría en ambas cámaras del Congreso en las elecciones de noviembre, algo que no se prevé.
Biden también propuso nuevas medidas para reducir el costo de la vivienda, entre ellas una desgravación fiscal de 10.000 dólares para los compradores de su primera vivienda -un reconocimiento de la angustia de los consumidores por las altas tasas de interés hipotecarias-, al tiempo que presumía del progreso económico de Estados Unidos bajo su mandato.
“Llegué al cargo decidido a superar uno de los periodos más difíciles de la historia de nuestro país. Y lo hemos conseguido. No sale en las noticias, pero en miles de ciudades y pueblos el pueblo estadounidense está escribiendo la mayor historia de recuperación jamás contada”, dirá Biden sobre su trayectoria económica desde 2021, según extractos.
La economía estadounidense está funcionando mejor que la de la mayoría de los países de renta alta, con un crecimiento continuado del empleo y del gasto de los consumidores.
Sin embargo, los votantes republicanos dicen a los encuestadores que están profundamente insatisfechos con la economía, y los estadounidenses en general dan a Trump mejores calificaciones en las encuestas sobre cuestiones económicas.
Invitados y ausencias
Entre los invitados de la Casa Blanca al discurso de Biden figuraron desde activistas en favor de los derechos reproductivos a sindicalistas, pasando por beneficiarios de las leyes promovidas por Biden para abaratar los costos de los medicamentos, e incluso un primer ministro, el sueco Ulf Kristersson, cuyo país se ha convertido este jueves de modo oficial en el miembro número 32 de la OTAN, en una ceremonia celebrada en el Departamento de Estado.
La viuda del disidente ruso Alexei Navalny, Yulia Navalnaya, y la esposa del presidente de Ucrania Volodimir Zelensky, Olena Zelenska, habían sido invitadas a la ceremonia, pero ambas declinaron el ofrecimiento.
Manifestantes a favor de la causa de Palestina se reunieron durante el discurso del Presidente Biden, y otras personas protestaron frente a la Casa Blanca con carteles que denunciaban el genocidio en Gaza.