Un suerte de Súper Martes 2.0 es el que se desarrolló en Estados Unidos con seis estados que celebraron primarias demócratas. Tras los resultados de la semana pasada, cuando el exvicepresidente Joe Biden ganó 10 de los 14 estados en juego, el precandidato moderado tomó un impulso en los sondeos y las apuestas que lo hicieron correr como favorito se confirmaron anoche.
Es por eso que Bernie Sanders se jugó el todo por el todo en Michigan, estado que entregaba la mayor cantidad de delegados de la jornada (125), y donde en 2016 el político de 78 años logró vencer a Hillary Clinton. Y por ello, precisamente, el triunfo obtenido allí en esta ocasión por Biden fue para este un paso tan clave hacia la nominación como un duro golpe para el senador por Vermont, a quien de nada sirvió cancelar un mitin en Mississippi para pasar todo el fin de semana en grandes encuentros en Michigan.
Con el 85% de las papeletas escrutadas, el exvicepresidente, quien solo apareció en ese estado el lunes, se impuso por 52,9% de las preferencias contra el 38,0% de Sanders.
“Creo que Michigan será el punto de inflexión que, una vez más, cambia la trayectoria de la carrera. Los votantes demócratas decidieron que querían a Biden para enfrentar a Trump, que es una amenaza existencial. Nunca se revierte una tendencia como esta, solo se acelera”, explicó a La Tercera Stanley Greenberg, fundador de Greenberg Quinlan Rosner Research. “Biden surgió con los afroamericanos y los votantes suburbanos, pero también con los votantes de clase trabajadora donde estaba compitiendo con Sanders de todos modos”, agregó antes que los cómputos confirmaran sus proyecciones.
La victoria de Biden en Michigan fue acompañada, también el martes, por sus triunfos en Missouri (60,1%), que suma 36 delegados, y Mississippi (81,1%), que aporta 68.
Tras el avasallador resultado de la jornada, el exvicepresidente de Barack Obama hizo una breve alocución, en la que se dirigió hacia su contendor en la carrera demócrata por la nominación: “Quiero agradecer a Bernie Sanders y a sus seguidores por su energía infatigable y su pasión. Tenemos el mismo objetivo y juntos vamos a vencer a Donald Trump”. En línea con los resultados que arrojaban los cómputos, Biden agregó que, “aunque todavía queda camino, parece que vamos a tener otra buena noche”. El precandidato moderado, quien prometió que buscará “recuperar el alma de la nación”, insistió en que “sabemos pelear, pero ahora debemos demostrar también que sabemos curar”.
A su turno, el equipo de campaña de Bernie Sanders anunció que el senador por Vermont no comparecería ante la prensa para referirse a los cómputos.
Suspensión de campaña
Para los analistas, la derrota de Sanders en Michigan lo deja herido de guerra y tendrá que hacer un gran esfuerzo para intentar recuperarse. La próxima fecha es el próximo martes 17 de marzo, cuando otros cuatro estados midan sus preferencias demócratas (Arizona, Florida, Illinois y Ohio).
De todos modos, la continuación de la campaña se prevé compleja, puesto que ayer, ambos candidatos cancelaron actos de campaña en Ohio por temor al contagio del coronavirus.