El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, lamentó el miércoles el tiroteo que ha tenido lugar en Kansas City, en el estado de Misuri, durante el desfile de celebración por la victoria del equipo de fútbol americano de los Chiefs en el Super Bowl, pidiendo de nuevo una prohibición de las armas de fuego, tan resistida por la Asociación Nacional del Rifle.
“El Super Bowl es el acontecimiento más unificador de Estados Unidos. No hay nada que nos una más. Y la celebración de la victoria en el Super Bowl es un momento de alegría incomparable para el equipo ganador y sus seguidores. Que esta alegría se convierta hoy en tragedia en Kansas City cala hondo en el alma estadounidense”, anifestó.
Biden aseveró que “los acontecimientos de hoy deberían conmovernos, escandalizarnos, avergonzarnos” para “actuar” ante la violencia armada. “¿A qué estamos esperando? ¿Qué más necesitamos ver? ¿Cuántas familias más tienen que ser destrozadas?”, cuestionó a través de un comunicado de la Casa Blanca.
Así, aprovechó la ocasión para volver a pedir una serie de medidas que incluyan la prohibición de las armas de asalto, el límite de los cargadores de gran capacidad o el refuerzo de los controles de antecedentes. “Es hora de actuar (...) Sabemos lo que tenemos que hacer, solo necesitamos el valor para hacerlo”, afirmó.
El mandatario ha recordado que el miércoles se cumplieron seis años del tiroteo en el instituto Marjory Stoneman Douglas en Parkland en el que un joven de 24 años armado con un fusil de asalto mató a 17 personas -14 estudiantes y tres trabajadores- e hirió a otras catorce, y ayer hizo un año del tiroteo en la Universidad Estatal de Michigan, en el que murieron tres alumnos y cinco resultaron heridos.
Además, durante esta jornada tres agentes de la policía resultaron heridos de bala, dos de ellos de gravedad, mientras intentaban ejecutar una orden de arresto por crueldad animal en Washington; a la vez, en un suceso separado cuatro estudiantes quedaron heridos en un tiroteo en el instituto Benjamin Mays de Atlanta.
Tras ello, Biden expresó que Estados Unidos tiene que ser “un país en el que la gente debería tener derecho a ir a la escuela, a ir a la iglesia, a caminar por la calle y a asistir a la celebración del Super Bowl sin miedo a perder la vida a causa de la violencia armada”.
“Hasta ahora hemos tenido más tiroteos masivos en 2024 que días en el año. La epidemia de la violencia armada está destrozando familias y comunidades cada día. Algunos llegan a las noticias, aunque gran parte (de ellas no), pero todas son inaceptables”, argumentó el mandatario estadounidense, que ha agregado que junto a la primera dama, Jill Biden, está rezando por las víctimas y para que el país “encuentre la determinación de poner fin a esta epidemia sin sentido de violencia armada que nos desgarra”.
Durante el desfile de celebración de la victoria de los Chiefs en el Super Bowl, al menos una persona ha muerto y 22 han resultado heridas, incluidos niños, en un tiroteo en Kansas City, donde se esperaba que acudiera alrededor de un millón de personas y que contaba con 800 agentes desplegados. Las autoridades han detenido a tres personas supuestamente relacionadas con el ataque.