Alrededor de las 11:30, hora del Este de Estados Unidos, el presidente Joe Biden se reunió con Donald Trump para comenzar la transferencia de poder en la Oficina Oval de la Casa Blanca, en Washington D.C.. Al comienzo de la reunión, cuando los periodistas estuvieron presentes solo por un momento, los dos hombres se estrecharon la mano.

Biden, que habló primero, pidió una transición sin problemas. Trump luego dijo que la política es difícil y agradeció a Biden por una transición sin problemas. “La política es dura y, en muchos casos, no es un mundo muy agradable. Pero hoy fue agradable y lo aprecio mucho”, valoró Trump. Biden respondió: “De nada”.

Ninguno de los dos respondió preguntas de los periodistas.

El presidente de EE. UU., Joe Biden, se reúne con el presidente electo Donald Trump en la Oficina Oval de la Casa Blanca en Washington, EE. UU., el 13 de noviembre de 2024. Foto: Reuters

La caravana de Trump atravesó la puerta fuertemente custodiada de la Casa Blanca y el ex y futuro presidente republicano fue recibido en la Oficina Oval por Biden, quien lo derrotó en las elecciones de 2020. Afuera, en la entrada de la Casa Blanca, una multitud enorme de periodistas se reunió anticipando el gran evento, consignó la agencia Reuters, presente en el lugar.

Trump visitó a los republicanos de la Cámara de Representantes antes de su viaje a la Casa Blanca por invitación de Biden, quien honró la tradición de décadas de antigüedad en la que el presidente saliente recibe al entrante, una muestra de respeto que Trump no extendió a Biden mientras negaba que hubiera perdido en 2020, según consignó The New York Times.

La tradicional reunión suele ser fotografiada con el presidente saliente y el entrante sentados uno al lado del otro en la Casa Blanca. Como reflejo de la acritud de las elecciones de 2020, Trump evitó la reunión tras ser derrotado por Biden.

Donald Trump y Joe Biden se dan la mano en el Salón Oval de la Casa Blanca. Foto: Reuters.

Al menos frente a las cámaras, la discusión entre el Donald Trump y Joe Biden fue corta: menos de un minuto. El presidente y anfitrión de la reunión, Biden, dijo: “Bueno, señor presidente electo y ex presidente y Donald, felicitaciones, y esperamos tener como dijimos una transición sin problemas. Vamos a hacer todo lo posible para asegurarnos de que estés acomodado, lo que necesites. Y vamos a tener la oportunidad de hablar de algo de eso hoy. Así que bienvenido, bienvenido de vuelta”.

Después de la intervención para las cámaras, ambos políticos se vieron en una reunión a puerta cerrada, de la que nada ha trascendido aún. Se esperaba, sin embargo, que Biden hubiera insistido al republicano respecto a la importancia de no abandonar a Ucrania, según indicó Jake Sullivan, consejero de seguridad nacional.

Una polémica respecto a la reunión fue la ausencia de Melania Trump, que oficialmente está “en tour con su libro”. Esto, siendo la tradición que la primera dama saliente reciba en paralelo a la primera dama entrante. Al final, Jill Biden si tomó parte en la reunión de Trump y su esposo, entregándole una carta manuscrita al futuro presidente como felicitación para su mujer, en la que, al igual que su esposo, expresa la voluntad de colaborar en la transición.

“La señora Trump no irá y no han hablado al respecto”, confirmó una fuente anónima al Daily Mail. Distante, la esposa de Donald Trump no ha estado muy involucrada en la campaña de su marido, y habría llegado a un acuerdo con este último para “no ser primera dama las 24 horas del día, los 7 días de la semana”, reveló Page Six el 28 de junio. Su instalación en la Casa Blanca también sigue siendo incierta. De hecho, Melania Trump divide su tiempo entre Nueva York, donde estudia su hijo Barron, y la casa familiar en Palm Beach.

Melania Trump , captura de pantalla.

En el Capitolio, la sede legislativa de Estados Unidos, el presidente electo recibió una gran ovación de los congresistas republicanos, muchos de los cuales le grababan con sus teléfonos móviles. En ese contexto triunfante, Trump se permitió bromear con la posibilidad de presentarse otra vez: “Sospecho que no volveré a postularme, a menos que hagan otra cosa, a menos que digan que vamos tan bien que tengamos que averiguar algo”.

Sin embargo, aquello es ilegal según la enmienda número 22 de la constitución norteamericana. “Nadie puede ser elegido para la presidencia más de dos veces”, se lee en el acta fundacional de Estados Unidos, sin que se trate de mandatos consecutivos o no. Donald Trump fue elegido presidente en 2016 y 2024, por lo que no podría presentarse en 2028.

Antes de 1947, la Constitución estadounidense no limitaba el número de mandatos presidenciales, lo que permitió en particular a Franklin Roosevelt ser elegido presidente de Estados Unidos cuatro veces entre 1932 y 1944. Si Donald Trump desea presentarse a la Casa Blanca en 2028, tendría que modificar la Constitución. En los Estados Unidos, una enmienda de la Constitución debe ser aprobada por una mayoría de dos tercios de la Cámara de Representantes y del Senado reunidos en el Congreso, así como por las tres cuartas partes de las asambleas legislativas de los estados federales.

Nominaciones

Trump, dijo el miércoles que nominará al senador republicano Marco Rubio para ser su secretario de Estado. “Será un firme Defensor de nuestra Nación, un verdadero amigo de nuestros Aliados y un Guerrero intrépido que nunca retrocederá ante nuestros adversarios”, dijo Trump en un comunicado.

Rubio era sin duda la opción más dura en la lista de Trump para secretario de Estado, y en el pasado ha abogado por una política exterior enérgica con respecto a los enemigos geopolíticos de Estados Unidos, como China, Irán y Cuba.

La crisis de Ucrania ocupará un lugar destacado en la agenda de Rubio.

Rubio, de 53 años, ha dicho en entrevistas recientes que Ucrania necesita buscar un acuerdo negociado con Rusia en lugar de centrarse en recuperar todo el territorio que Rusia ha tomado en la última década. También fue uno de los 15 senadores republicanos que votaron en contra de un paquete de ayuda militar de 95.000 millones de dólares para Ucrania, aprobado en abril.

“No estoy de parte de Rusia, pero por desgracia la realidad es que la guerra en Ucrania va a terminar con un acuerdo negociado”, declaró Rubio a la NBC en septiembre.

La elección de Rubio tiene importancia tanto a nivel nacional como internacional.

También anunció que planea nominar al representante de Florifa, Matt Gaetz como fiscal general y a Tulsi Gabbard, ex congresista demócrata de Hawái, como directora de inteligencia nacional.