El expresidente ultraderechista brasileño Jair Bolsonaro afirmó este sábado en un mitin de simpatizantes conservadores que la derecha está ganando terreno a nivel internacional, en Italia y Francia, y dijo que espera que el expresidente estadounidense Donald Trump vuelva a la Casa Blanca este año.
“Si Dios quiere, será Trump en noviembre”, dijo a una multitud de 3.500 seguidores en el evento CPAC Brasil 2024 en Balneario Camboriu, en el sur de la nación sudamericana.
El acto pretendía recabar apoyos para los candidatos del partido de Bolsonaro en las elecciones municipales de este año y proyectar su influencia de cara a la carrera presidencial de 2026.
El encuentro fue anunciado como el primer gran mitin de la oposición para las elecciones municipales de octubre.
“Queremos que Bolsonaro vuelva”, coreaban algunos de los presentes en el acto que quieren verlo de nuevo en el poder, aunque Bolsonaro tiene prohibido presentarse a cargos de elección popular hasta 2030 por ataques a la democracia.
Los oradores criticaron al actual gobierno brasileño del presidente Luiz Inácio Lula da Silva, calificándolo de corrupto. Defendieron los valores familiares cristianos provida, la prohibición del aborto en discursos a favor de las armas y en contra de las drogas.
“Será muy importante para nosotros reunir de nuevo a conservadores con una visión liberal de la economía para debatir el futuro de la derecha en Brasil”, afirmó el exministro de Medio Ambiente, Ricardo Salles en las redes sociales de CPAC Brasil.
También intervino en el mitín el excandidato presidencial de la derecha chilena José Antonio Kast y se esperaba que el presidente argentino, Javier Milei, hablara en la sesión de clausura el domingo por la tarde.
Bolsonaro perdió su intento de reelección frente a Lula en 2022 y se le ha prohibido presentarse a cargos de elección popular hasta 2030 debido a sus ataques a la democracia brasileña y a su sistema de voto electrónico.
A pesar de estar siendo investigado por su presunto papel en animar a sus seguidores a asaltar edificios gubernamentales una semana después de que Lula asumió el cargo en enero del año pasado, Bolsonaro mantiene un gran número de seguidores que comparten sus opiniones de derechas, que difunde con éxito en las redes sociales.
Guilherme Casaroes, politólogo del centro de estudios FGV en Sao Paulo, dijo que la presencia de Milei y Kast muestra que Bolsonaro y sus socios políticos quieren que Brasil se convierta en un centro hemisférico para la coordinación de la extrema derecha.
“El evento de la CPAC servirá como plataforma para que los extremistas de Brasil hagan global su narrativa, basándose en la idea de que los conservadores de todo el hemisferio están siendo perseguidos por gobiernos de izquierda y por tribunales autoritarios”, dijo.