El exmandatario brasileño Jair Bolsonaro negó el jueves un reporte de prensa que afirmaba que consultó a oficiales castrenses de alto rango sobre llevar a cabo un golpe de Estado con el fin de impedir que Luiz Inácio Lula da Silva asumiera la presidencia en enero pasado.
Tres miembros del equipo jurídico de Bolsonaro dijeron en un comunicado publicado en las cuentas de redes sociales del exgobernante de extrema derecha que éste “nunca tomó ninguna medida que entrara en conflicto con los límites y garantías establecidas por la Constitución”.
Horas antes, el periódico O’ Globo reportó que un exasesor de Bolsonaro dijo en un testimonio vinculado a un acuerdo con la fiscalía que el entonces presidente discutió con los comandantes del ejército, de la marina y de la fuerza aérea de Brasil la posibilidad de anular los resultados de las elecciones del año pasado, en las que Lula resultó ganador.
El periódico no identificó las fuentes de su despacho.
El equipo jurídico de Bolsonaro también dijo que no había emprendido ninguna acción que violara la ley durante su gobierno que transcurrió de 2019 a 2022.
Bolsonaro ha sido objeto de varias investigaciones desde que dejó el cargo, incluida una que está revisando si desempeñó algún papel en los disturbios de sus simpatizantes en la capital Brasilia y en la irrupción en edificios gubernamentales del 8 de enero.