Ocho artefactos explosivos colocados al costado de un camino por un cartel del narcotráfico, según las autoridades, mataron a seis personas, entre ellas cuatro funcionarios y dos civiles, e hirieron a otras 14, en el ejemplo más reciente del reto de tipo militar cada vez más descarado que representan las organizaciones delictivas en México.
El gobernador del estado occidental de Jalisco, Enrique Alfaro, dijo que el ataque sucedió la noche del martes en Tlajomulco, un suburbio de Guadalajara, la capital estatal. “En un hecho que no habíamos visto antes aquí”, expresó este miércoles Alfaro, que calificó el ataque de “acto de terror brutal” y lo atribuyó a un cartel al que no identificó.
Durante una conferencia de prensa, el gobernador informó que en el hecho se utilizaron ocho artefactos improvisados de los cuales explotaron siete. El ataque se originó a partir de una denuncia anónima sobre la presencia de restos humanos en las cercanías de Tlajomulco lo que motivó la salida al terreno de quienes resultaron después afectados por los explosivos.
Tras el siniestro, se ordenó la suspensión de las operaciones de búsqueda de personas desaparecidas en el estado, donde activistas han denunciado la existencia de numerosas fosas clandestinas.
Alfaro dijo que las autoridades acudieron al lugar, pero “fue una trampa para nuestros elementos. Lo que sucedió es que esta llamada buscaba la presencia de nuestras policías para poder agredirlas con estos artefactos”.
“No nos vamos a doblar, ni nos vamos a rendir”, señaló el gobernador en una visita a Tlajomulco en la que atribuyó el atentado a “todas las acciones que hemos realizado para decirle a los criminales que no van a seguir actuando con libertad y sin consecuencias”.
El fiscal general del Jalisco, Luis Méndez, declaró a la prensa que entre los fallecidos hay tres elementos de la Fiscalía, un policía municipal y dos civiles y que la cifra de lesionados subió a 14, algunos de ellos en condición delicada. En la explosión también resultaron con daños tres vehículos oficiales y uno civil.
Alfaro no identificó al objeto de sus sospechas, pero el Cartel Jalisco Nueva Generación tiene bastante experiencia en el uso de explosivos improvisados y drones lanzabombas.
Previamente el martes, un funcionario federal dijo que otro cartel había matado a un oficial de la Guardia Nacional en el estado de Guanajuato mediante un coche bomba.