El primer ministro británico, Boris Johnson, ha avisado este domingo que prevé endurecer las medidas de restricción en Reino Unido ante el enorme repunte de casos de coronavirus identificado en los últimos días, y que ha culminado de momento este sábado con un récord histórico de casi 58.000 nuevos contagios.
Asimismo, las autoridades británicas han confirmado 445 fallecidos más en las últimas horas, hasta constatar un total de 2.599.789 contagios y 74.570 víctimas mortales.
“Me he hecho completamente a la idea de que es necesario hacer lo necesario para contener este virus”, ha hecho saber Johnson en declaraciones a la cadena BBC en un momento en que el país está asolado por la enfermedad, agravada por la identificación de una nueva variante dentro de sus fronteras potencialmente más contagiosa que cepas previas.
“Tenemos que examinar esta situación de manera constante, pero no nos van a dirigir motivaciones políticas, sino cuestiones de sanidad pública”, ha añadido.
Londres, la capital, ha registrado en los últimos días 807 positivos por cada 100.000 habitantes, frente a la media de 675 de la semana pasada.
Ante esta tesitura, Johnson ha asegurado que no descarta ninguna opción, y que podría mantener las escuelas cerradas hasta mayo, llegado el caso.
“Estamos luchando contra una nueva cepa que se está dejando notar particularmente en Londres y en el sureste del país, y es por eso que tenemos que tomar medidas excepcionales en algunas zonas”, ha declarado.
Así las cosas, el primer ministro ha explicado que ahora tiene ante él un “espectro de medidas más duras” que someterá a consideración las próximas semanas, entre ellas el cierre de los colegios, aunque “no es una opción que queramos abordar”.