El primer ministro británico, Boris Johnson, prometió el martes hacer "muy pronto" nuevas propuestas sobre el Brexit a Bruselas, pero a un mes de la fecha fatídica y sin acuerdo a la vista los responsables europeos se muestran escépticos.
"Vamos a hacer una muy buena oferta, vamos a hacerla formalmente muy pronto", declaró Johnson por la mañana a la radio BBC desde Manchester, en el norte de Inglaterra, donde se celebra el congreso anual de su Partido Conservador. Según algunos medios, esta podría presentarse el jueves, en cuanto termine el congreso.
El Reino Unido decidió en referéndum hace más de tres años salir de la Unión Europea y debía hacerlo el pasado marzo. Pero ante el rechazo del parlamento británico al acuerdo negociado por la anterior primera ministra, Theresa May, la fecha fue aplazada dos veces, hasta el 31 de octubre.
Johnson, que llegó al poder a finales de julio al reemplazar a May como líder del Partido Conservador, quiere renegociar con la UE el punto más conflictivo del texto: la denominada "salvaguarda irlandesa" o cómo evitar una nueva frontera dura entre la provincia británica de Irlanda del Norte y la República de Irlanda, país miembro de la UE.
El objetivo es preservar el frágil acuerdo de paz del Viernes Santo, que en 1998 puso fin a tres décadas de sangriento conflicto en Irlanda del Norte, pero Londres y Bruselas no se ponen de acuerdo sobre cómo.
El momento "de la verdad"
El martes se filtraron a los medios varias versiones de las propuestas de Johnson.
Una de ellas contemplaba realizar los controles aduaneros en instalaciones levantadas a pocos kilómetros de la línea fronteriza, lo que enfureció al gobierno irlandés.
Johnson declaró BBC que lo publicado "no es exacto". Son "documentos técnicos que no estaban en nuestras propuestas finales a la Comisión Europea", dijo después ante el parlamento el secretario de Estado encargado del Brexit, James Duddridge.
El primer ministro de Irlanda, Leo Varadkar, recibió con satisfacción que Johnson descartase dichas ideas. De lo contrario, habría demostrado que el gobierno británico actúa "de mala", afirmó en alusión a especulaciones según las cuales Johnson buscaría hacer fracasar la negociación para justificar un Brexit brutal.
Por la tarde, Johnson dio algunos detalles de su propuesta en una serie de entrevistas televisivas: "estos controles no tienen que hacerse en la frontera (...) no tiene que precisar nuevas infraestructuras, pero (...) hay que tener algún tipo de controles".
"Pueden ser controles entre el importador y el exportador, el remitente y el receptor", precisó al canal ITV, considerando que "hay buenas posibilidades de llegar a un acuerdo".
Sin embargo "la negociación será difícil", reconoció a la televisión BBC. "Este el momento de la verdad", dijo a Sky News.
"Plausible" Brexit sin acuerdo
Los contactos entre Londres y Bruselas se intensificaron en las últimas semanas, pero los responsables europeos afirman no haber recibido propuestas británicas susceptibles de desembocar en un acuerdo.
No hemos recibido ninguna propuesta del Reino Unido", reiteró el martes a la AFP una fuente en Bruselas. "Estamos dispuestos a examinar propuestas viables que cumplan con todos los objetivos de la salvaguarda", dijo otra.
El ministro francés de Relaciones Exteriores, Jean-Yves Le Drian, afirmó no obstante ante el parlamento francés que "hoy la hipótesis (...) de un Brexit sin acuerdo es la más plausible".
En todas las entrevistas del martes, Johnson reafirmó su determinación a llevar a cabo el Brexit el 31 de octubre, incluso si no hay acuerdo.
Para impedir una salida brutal del bloque, que según informes del propio gobierno provocaría escasez de alimentos frescos y medicamentos y podría ocasionar violentos disturbios, el Parlamento aprobó en septiembre una ley que le obliga a pedir otra prórroga a la UE si, tras la cumbre europea del 17 y 18 de octubre, no ha logrado un acuerdo con los 27.
Pero Johnson asegura que no lo hará. Aunque rehúsa explicar cómo.