El primer ministro británico Boris Johnson prometió que todos los adultos recibirán una primera dosis de vacuna contra el covid-19 antes de fin de julio, acelerando así el calendario previsto, justo antes de anunciar el lunes una salida “prudente” del confinamiento.
Hasta ahora el gobierno se había fijado como objetivo vacunar a la población adulta antes de fin de septiembre, tras haber sido uno de los primeros países occidentales en lanzar la campaña de vacunación masiva en diciembre.
Al 15 de febrero, una primera dosis de vacuna fue administrada ya a 15 millones de personas, entre ellas mayores de 70 años y personal sanitario. Desde entonces, otros 2,2 millones de personas suplementarias ha sido vacunadas con una primera dosis.
Reino Unido es uno de los países más afectados por la epidemia, con más de 120.000 personas fallecidas por el virus, aunque el confinamiento decretado a principios de enero ha reducido el número de casos y hospitalizaciones.
El dirigente conservador prevé anunciar el lunes al parlamento su hoja de ruta para salir del confinamiento, y la prioridad será la reapertura de las escuelas de forma progresiva desde el 8 de marzo.
Johnson ha advertido en todo caso que la vía de salida del confinamiento será “prudente y progresiva”.