Boris Johnson se convirtió oficialmente este miércoles en primer ministro británico con la misión de materializar a cualquier precio la salida del Reino Unido de la Unión Europea el 31 de octubre.
El otrora ministro de Relaciones Exteriores, conocido por sus meteduras de pata, su oratoria florida y brillante, y su turbulenta vida amorosa, fue designado el martes nuevo líder del Partido Conservador, lo que le valdrá suceder a Theresa May.
El político de 55 años asumió oficialmente la dirección del gobierno en un encuentro con la Reina Isabel II en el palacio de Buckingham el miércoles por la tarde, y luego pronunció un discurso inaugural ante su residencia del número 10 de Downing Street.
Johnson reiteró sus intenciones de dar inicio al Brexit el próximo 31 de octubre "sin peros", no descartando que el proceso de divorcio se haga sin la aprobación del acuerdo entre Londres y Bruselas.
"Ha llegado el tiempo de actuar, de tomar una liderazgo fuerte y cambiar nuestro país para mejor", agregó el político conservador.
El tory no perdió tiempo y se dispone de entrada a nombrar al cerebro de la campaña del Brexit, Dominic Cummings, como consejero, según una fuente próxima a Johnson.
Al mismo tiempo, el actual ministro de Finanzas, Philip Hammond, presentó como previsto su dimisión, ya que está en desacuerdo con la política del nuevo mandatario.
Durante su discurso como nuevo líder conservador el martes, Johnson animó a sus conciudadanos a "abandonar las dudas y la negatividad", y se comprometió a unir un país fuertemente dividido.
Pero su promesa de abandonar el bloque de los 27 con o sin un acuerdo lo pone en una situación de colisión con diputados de alto nivel de su propio partido que no quieren un Brexit abrupto, amenazando su ya de por sí escasa mayoría y elevando la perspectiva de unas elecciones generales anticipadas.
May tuvo que dimitir al no conseguir que el parlamento aprobase el acuerdo de divorcio que había alcanzado con la Unión Europea, un texto que Johnson ha prometido revisar, si bien Bruselas ya ha advertido que no piensa cambiar nada.
Pero su promesa de abandonar la UE con o sin un acuerdo lo pone en una situación de colisión con diputados de alto nivel de su propio partido que no quieren un Brexit duro, amenazando su ya de por sí escasa mayoría y elevando la perspectiva de unas elecciones generales anticipadas.
Un Brexit que beneficie a todo Reino Unido
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Foto: EFE[/caption]
Por su parte, la saliente primera ministra británica, confió este miércoles en que su sucesor pueda cumplir con un Brexit que beneficie a todo el Reino Unido y le deseó lo mejor en los próximos años.
En un breve discurso al país ante la residencia oficial de Downing Street, May afirmó que ha sido el "mayor de los honores" haber servido durante tres años como jefa del Gobierno del Reino Unido.
May acudió al palacio de Buckingham para presentarle formalmente su dimisión a la reina Isabel II y recomendarle que pida a Johnson que forme un nuevo Ejecutivo.