Funcionarios, aliados y simpatizantes de la campaña de la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, han comenzado a hacer llamadas para asegurar el apoyo de los delegados a su candidatura antes de la Convención Nacional Demócrata de agosto, dijeron varias fuentes.
Los contactos, que comenzaron poco después de que el presidente Joe Biden abandonó su candidatura a la reelección el domingo, buscan garantizar que Harris sustituya a Biden en la papeleta electoral del 5 de noviembre como rival del partido frente al republicano Donald Trump.
“Mucha gente está trabajando en ello ahora mismo”, dijo una fuente familiarizada con el asunto. “Ella ha dejado claro que trabajará para ganarse su apoyo”, dijo la fuente.
Unos 4.000 delegados demócratas, que se reunirán en Chicago del 19 al 22 de agosto, elegirán al candidato del partido. La mayoría están comprometidos con Biden, pero tras su abrupto anuncio, no están obligados por ninguna ley ni por las normas del partido a respaldar a nadie.
Biden no tiene poder directo sobre la elección formal que realicen los delegados.
Harris necesita el apoyo de 1.969 de los 3.936 delegados demócratas para asegurar su nominación en la convención de agosto.
Grupos defensores del derecho al aborto como Emily’s List y Reproductive Freedom for All se han puesto en contacto con los delegados para defender también a Harris. La vicepresidenta ha sido la voz más destacada a favor del derecho al aborto en el Gobierno de Biden.
La oficina de la vicepresidenta no quiso hacer comentarios.