Beijing desmintió el viernes que desee injerir en las elecciones presidenciales estadounidenses de noviembre y denunció las acusaciones “inventadas” del gigante informático Microsoft, que dijo que había detectado ciberataques procedentes sobre todo de China.
“No tenemos ninguna gana de injerir y jamás lo hicimos”, dijo Zhao Lijian, portavoz del ministerio chino de Relaciones Exteriores.
Tom Burt, vicepresidente del gigante de la informática, dijo el jueves en un blog que había detectado ataques cibernéticos de Rusia y China en las últimas semanas. Los ataques estarían dirigidos contra individuos y organizaciones vinculadas a la preparación de los comicios.
Los intentos fallidos de pirateo de origen chino habrían apuntado directamente a figuras políticas como el candidato demócrata Joe Biden y a una persona “anteriormente asociada”con la administración del Presidente Donald Trump.
Un grupo chino llamado Zirconium habría operado de esta manera casi 150 veces entre marzo y septiembre de 2020.
“Microsoft no debería inventar hechos, ni utilizar a China para crear polémicas”, dijo Zhao Lijian y lanzó acusaciones contra Estados Unidos.
“Durante mucho tiempo, el gobierno y las empresas de EE.UU. violaron las leyes internacionales” para “llevar a cabo robos cibernéticos, vigilancia y ataques” contra gobiernos, empresas e individuos extranjeros, dijo Zhao.
“Estados Unidos son el verdadero imperio de la piratería, las escuchas telefónicas y el espionaje”, afirmó.
Acusaciones “absurdas”
Por su parte, Irán calificó el viernes de “absurdas” las acusaciones de Microsoft.
“Estados Unidos, que desde hace décadas se entromete en elecciones de otros países como Irán, no está habilitado para hacer declaraciones tan absurdas” indicó la agencia oficial iraní Irna, citando al portavoz del ministerio de Exteriores, Saeed Jatibzadeh.
Microsoft menciona incursiones provenientes de Irán que afectaron cuentas individuales de personas del entorno de la campaña de Trump.
“Para Teherán, poco importa quién esté en la Casa Blanca. Lo que cuenta es el compromiso de Washington en respetar los derechos, las normas y reglas internacionales y no entrometerse en los asuntos de los demás”, declaró Jatibzadeh.
Los responsables iraníes han declarado varias veces que no están a favor de ningún candidato a la elección presidencial de Estados Unidos.