Ciudad de Gaza nuevamente bajo acecho: Israel ordena evacuación de civiles palestinos
El primer ministro Benjamin Netanyahu aseguró el miércoles a un enviado estadounidense su compromiso de lograr un acuerdo de alto el fuego en Gaza, siempre que se respeten las "líneas rojas" de Israel.
El Ejército israelí hizo un llamado el miércoles a todos los habitantes de Ciudad de Gaza mediante folletos distribuidos en árabe para que evacuaran la urbe hacia el sur, en dirección a la zona de Deir al-Balah usando los cruces designados.
Los miles de folletos, que eran un “llamado a todos en la Ciudad de Gaza”, indicaban rutas para salir hacia el sur y advertían que “seguiría siendo una zona de combate peligrosa”. La ONU y otras organizaciones internacionales han denunciado las órdenes de evacuación israelíes por considerarlas confusas e inseguras. Cientos de miles de habitantes de Gaza han sido desplazados varias veces desde octubre de 2023.
Esta semana, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) anunciaron que sus tropas están operando en varios lugares de Ciudad de Gaza, incluso fuera del barrio de Shejaiya, en la parte oriental de la ciudad, donde el Ejército ha permanecido activo durante más de una semana. Esta es la primera vez desde los ataques de Hamas del 7 de octubre que se ha pedido a todos los residentes de la Ciudad de Gaza que evacuen la urbe, indicó el diario israelí Haaretz.
En los últimos días, los residentes de Ciudad de Gaza dijeron al periódico que las FDI han ampliado sus operaciones y han incrementado los ataques aéreos y terrestres en la urbe, similares a las operaciones realizadas al comienzo de la guerra. Así, la intensificación de los combates ha obligado a decenas de miles de personas a huir de sus hogares y espacios públicos, como escuelas y campus, que sirvieron como lugares de refugio en los últimos meses.
La Media Luna Roja anunció el cierre de todas sus estaciones y clínicas en la ciudad debido a las operaciones de las FDI. Los residentes dicen que, a diferencia de lo que ocurría al principio de la guerra, ahora no hay ningún lugar al que huir, porque el resto de la Franja de Gaza está abarrotado y en ruinas.
“Entonces, teníamos un lugar a donde huir, principalmente al centro de la Franja de Gaza y también al sur, y la gente podía encontrar refugio en todo tipo de lugares, incluso en escuelas y edificios públicos de la ciudad”, dijo un residente de la Ciudad de Gaza a Haaretz.
“Pero ahora todo está destruido de norte a sur y, si bien todavía queda algún lugar relativamente tranquilo, está completamente lleno de gente en tiendas de campaña como sardinas”, añadió. Testimonios recolectados por el periódico en la Ciudad de Gaza indican que los ataques se concentran en varios barrios del sur, oeste y este, así como en el centro de la ciudad y la Ciudad Vieja.
En los últimos días una serie de videos han circulado en redes sociales desde Gaza que muestran a miles de personas caminando por las calles sin un destino claro. Algunas imágenes muestran a personas huyendo a pie y otras en vehículos o en carros tirados por caballos o burros.
Testimonios de la ciudad cuentan que muchas familias, al no tener dónde huir, se quedan en las calles, y algunas incluso han decidido regresar a sus casas, pese al riesgo de que su barrio se convierta en un foco de combates.
Fatima Shaheen, de unos 70 años, dijo al portal Middle East Eye que preferiría morir en su casa destruida antes que huir. El mes pasado, su casa en Jabalia fue destruida por los bombardeos israelíes, pero ella rechazó marcharse y pasó sus días entre los escombros.
“Nos mantendremos firmes en nuestros hogares. Nos quedaremos en ellos”, afirmó. “Moriremos aquí o triunfaremos”.
Mohammad Kassab se hizo eco de la determinación de Shaheen. Obligado a abandonar su hogar en el barrio de Tuffah a principios de esta semana por la reciente ofensiva terrestre de Israel, Kassab optó por trasladarse más al norte, al campo de refugiados de Jabalia, en lugar de huir al sur. “Huí a Jabalia porque queremos permanecer firmes”, dijo a Middle East Eye.
“Todos podemos ver que quienes se desplazaron al sur ahora anhelan regresar”, señaló. “Allí no hay necesidades básicas”, añadió.
El martes, un ataque aéreo israelí tuvo como objetivo una escuela de la ONU que albergaba a personas desplazadas, matando al menos a 27 personas e hiriendo a 53, muchas de ellas mujeres y niños.
Protestas en Tel Aviv
A medida que la posibilidad de una tregua se va desvaneciendo, decenas de personas se reunieron frente a la sede de Defensa en Tel Aviv antes de una marcha planificada a Jerusalén encabezada por familiares de rehenes israelíes retenidos por Hamas en Gaza.
En una declaración pública, el grupo llamó al público a unirse a la marcha, que se espera que dure tres días y finalice el sábado frente a la oficina del primer ministro Benjamin Netanyahu en Jerusalén.
Einav Zangauker, cuyo hijo, Matan, está detenido en Gaza, dijo: “Esta mañana se publicó un informe que detalla cómo una y otra vez hubo acuerdos sobre la mesa y Netanyahu los torpedeó una y otra vez”.
“Estamos en el momento de la verdad para el acuerdo. Netanyahu... ¡no te atrevas a rompernos el corazón otra vez!”, lamentó Zangauker.
Arnon Bar-David, presidente de la mayor federación sindical de Israel, la Histadrut, anunció que ha destinado recursos para apoyar la marcha y ha designado un equipo para acompañarla y brindar asistencia operativa. Bar-David pidió al primer ministro “que haga todo lo posible para que nuestros hijos e hijas regresen a casa” e instó al público “a unirse detrás de las familias de los rehenes, expresar su apoyo a la lucha y unirse a la marcha”.
Bar-David añadió: “La Operación Espadas de Hierro sólo puede tener una imagen victoriosa: nuestros hermanos y hermanas, a quienes hemos logrado traer a casa. Como todos los padres en Israel, la lucha de Einav Zangauker es también mi lucha. Sólo cuando la vea abrazando a su hijo sabré que el Estado de Israel ha vuelto a ser él mismo”.
Netanyahu aseguró el miércoles a un enviado estadounidense su compromiso de lograr un acuerdo de alto el fuego en Gaza, siempre que se respeten las “líneas rojas” de Israel, según un comunicado de su oficina.
El premier se reunió con el enviado de Estados Unidos para Medio Oriente, Brett McGurk, en Jerusalén, dijo la oficina de Netanyahu. A principios de semana, funcionarios y mediadores israelíes criticaron a Netanyahu por potencialmente descarrilar los esfuerzos de alto el fuego al introducir nuevas demandas “no negociables”.
El miércoles, el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, dijo en la Knesset que “los logros de los soldados de las Fuerzas de Defensa de Israel son muchos. Matamos o herimos al 60% de los terroristas de Hamas”.
Agregó que “hemos desmantelado 25 batallones o la gran mayoría de ellos. Hemos devuelto a la mitad de los rehenes y estamos decididos a devolver al resto”.
El ministro de Defensa dijo que “la legitimidad internacional que exige condiciones humanitarias es una condición básica para permitir el funcionamiento del Ejército”.
Gallant explicó que “el gabinete tomó la decisión de que se debían impulsar las operaciones humanitarias para permitir la continuación de la guerra. Como parte de eso, aprobé, junto con el primer ministro, que se conectara la electricidad a la planta desalinizadora para permitir el abastecimiento de agua”.
Por su parte, Husam Badran, alto cargo del brazo político del grupo islamista Hamas, declaró que “la ocupación israelí no es seria en lo relativo a lograr un acuerdo de alto el fuego en Gaza”. Indicó que “los mediadores y todo el mundo se dan cuenta de que Netanyahu y su gobierno son el motivo del fracaso de las negociaciones”.
Así, manifestó que “la debilidad del sistema político, militar y de seguridad de la ocupación es una carta en manos de la resistencia”, indicando que “los intentos de presionar sobre el terreno o a nivel político al movimiento no harán que cambie sus posiciones”. En todo caso, reconoció que “es muy pronto para hablar de optimismo o pesimismo” sobre las negociaciones.
En tanto, en un discurso televisado, Hassan Nasrallah, el líder del grupo armado libanés Hezbolá, dijo que Israel no ha logrado una victoria en Gaza y que el mundo entero se da cuenta de que no puede lograr una derrota sobre Hamas, por lo que han aumentado los llamados a un alto el fuego.
En las negociaciones sobre un alto el fuego en la Franja de Gaza, Nasrallah señaló: “Hamas está negociando en nombre de todo el eje de la resistencia: lo que ellos acuerden, nosotros lo aceptaremos”.
“Nos mantienen informados y les gusta escuchar nuestras opiniones”, continuó. “Les decimos que tomen la decisión porque no queremos que nadie diga que nuestro frente está cansado… seguiremos luchando hasta que sea necesario”.
Hezbolá ha dicho frecuentemente que sus ataques contra el norte de Israel cesarán una vez que concluyan los combates en Gaza y la guerra llegue a su fin.
Las tensiones entre Israel y Hezbolá han aumentado a medida que la guerra se prolonga y los intercambios de disparos en la frontera entre Líbano e Israel se vuelven más frecuentes e intensos.
En las últimas semanas, altos funcionarios israelíes han prometido escalar a una guerra total en Líbano si no se llega a una solución diplomática que incluya la retirada de las fuerzas de Hezbolá de la frontera.
En tanto, Estados Unidos pronto comenzará a enviar a Israel las bombas de 500 libras (225 kilos) que la administración de Joe Biden había suspendido previamente, poniendo fin a una pausa de dos meses que había impuesto en un intento por reducir las víctimas civiles en Gaza, dijeron funcionarios estadounidenses citados por The Wall Street Journal.
Las bombas “están en proceso de ser enviadas” y se espera que lleguen a Israel en las próximas semanas, afirmó un funcionario de la administración estadounidense. Las bombas más pesadas de 2.000 libras (900 kilos) que debían formar parte del mismo envío todavía están en espera, añadió.
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