En la costa sureña de Atenas, Ellinikon, Grecia está transformando lo que antiguamente era un aeropuerto en la ciudad inteligente más grande de Europa. La nueva urbe sostenible fue anunciada como el proyecto de regeneración urbana más grande de la historia del continente. Tras más de una década de retrasos, la Marina Tower, que pronto será el primer rascacielos del país helénico, finalmente está empezando a levantarse.
“Los esqueletos de hierro de los condominios están tomando forma. Desde el puerto deportivo, con vistas al golfo Sarónico por un lado y la torre por el otro, es posible imaginar la futura ciudad, que contará con los espacios abiertos, las fuentes de energía sostenibles y los abundantes espacios verdes de los que Atenas carece actualmente”, describe la agencia Bloomberg.
Ubicada a lo largo de la Riviera de Atenas en el sitio del antiguo aeropuerto Ellinikon, que cerró en 2001, esta ciudad, la primera de su tipo, estará terminada en 2037 y aumentará el espacio verde de Atenas en un 44%. Ellinikon estará a 20 minutos en auto de Atenas. La idea de Lamda Development, la compañía que ganó la licitación del proyecto en 2014, es la de una ciudad futurista centrada en la energía sostenible, espacios abiertos y zonas verdes.
En el corazón del proyecto, se encuentra el Parque Ellinikon, el parque costero más grande de Europa, que ofrecerá 200 hectáreas de espacios verdes para eventos culturales, deportivos y de recreación. Contará, también, con diferentes instalaciones deportivas públicas, como un recinto de atletismo de más de 500.000 metros cuadrados, canchas de fútbol, tenis y baloncesto.
El Ellinikon, que contará con una inversión privada de 8.000 millones de euros, se abrirá en fases. La primera fase, programada para abrir en 2025, incluirá una torre residencial y una galería comercial. Posteriormente se lanzarán un complejo deportivo, un puerto y un sistema de transporte. Ellinikon ofrecerá una amplia gama de entretenimiento, con hoteles, restaurantes, un puerto deportivo con más de 400 amarres y centros comerciales.
El sitio estará conectado por senderos para caminar y andar en bicicleta, mientras que las instalaciones de vehículos eléctricos estarán al servicio de todo el desarrollo. “Había una incredulidad justificable” en los primeros días del proyecto, dijo en una entrevista Odisseas Athanasiou, director ejecutivo de Lamda.
La compañía incluso está negociando con una institución extranjera para obtener un terreno destinado a una universidad no estatal. Además, en el barrio de Ellinikon, se están llevando a cabo visitas para renovar el antiguo edificio de Catering Olímpico, que albergará la primera Facultad de Medicina no estatal, según informó el medio griego Protothema.
El Ellinikon también contará con un área residencial con un total de 65 zonas de construcción planificadas con departamentos contemporáneos de todos los tamaños y configuraciones. Algunas de ellas son las Cove Villas, las propiedades más exclusivas del complejo situadas frente al mar, The Marina Tower, la primera torre residencial de gran altura en Grecia con más de 200 residencias privadas, o las Cove Residences.
De hecho, la comercialización de residencias en Ellinikon ya ha sido un éxito notable hasta la fecha, especialmente en el distrito conocido como Little Atenas, donde se han puesto a la venta 243 unidades y ya se han reservado 140. Los departamentos, villas y condominios frente al mar de Marina Tower fueron los primeros en agotarse, lo que llevó a Lamda a anunciar ingresos por ventas de propiedades de 641 millones de euros hasta marzo pasado. Se espera que la ciudad albergue hasta 20.000 personas en unas 10.000 residencias en los próximos 13 años.
El proyecto pretende ser pionero en la integración de tecnologías de “ciudad inteligente” de última generación, con conectividad digital avanzada tanto por cable como inalámbrica, soluciones completas de hogar y oficina inteligentes, y sistemas de medición e iluminación inteligentes, entre otros avances.
El propósito será ofrecer una experiencia diaria digitalmente asistida para residentes y trabajadores, así como una experiencia memorable para los visitantes que exploran la ciudad. Se instalará software para supervisar los servicios de residuos, agua y energía en todo el complejo. “Es una ciudad inteligente de extremo a extremo”, dijo Athanasiou, y agregó: “Nos gusta llamarla ‘Paraíso del código postal’”.
No obstante, el proyecto Ellinikon no siempre se vio encaminado al éxito. Lamda adquirió el terreno en 2014, encontrando ruinas del antiguo aeropuerto -incluso aviones abandonados- y una gran presencia de refugiados e inmigrantes indocumentados. La playa estaba marcada por locales nocturnos abandonados y viejas instalaciones deportivas. Los retrasos en los permisos se sumaron a la dificultad, agravada por la crisis financiera de Grecia en ese momento. Y la industria de la construcción estaba debilitada, exacerbada por los crecientes costos debido a la crisis energética. Estos obstáculos, aunque considerables, se han ido superando gradualmente.
Por eso es que la realización de este proyecto, más comúnmente visto en lugares como China o Emiratos Árabes Unidos, representa una señal clara de la revitalización de Grecia tras la crisis, y del renovado interés de los inversores en el país. El sector turístico de Grecia se ha recuperado desde la era Covid, con 32 millones de visitantes el año pasado y 2024 en camino de ver un número récord de llegadas, detalla el medio Infobae.
Se estima que este desarrollo aportará significativamente al PIB griego, generando hasta 80.000 nuevos empleos y proporcionando ingresos fiscales considerables una vez que se complete en 2037. Además, se espera que atraiga a un millón de turistas adicionales anualmente, ofreciendo opciones de alojamiento que van desde un hotel Mandarin Oriental hasta un casino-resort integrado.
Aún así, la compañía Lamda continúa enfrentando la dificultad de la escasez de mano de obra. Con la próxima construcción del centro comercial Ellinikon el próximo año, se requerirán alrededor de 7.000 trabajadores, mientras que actualmente solo cuentan con aproximadamente 2,000 empleados, por lo que la empresa está en conversaciones avanzadas con contratistas para la importación de trabajadores de la construcción de otros países.
Además, Athanasiou destacó que el mayor obstáculo de la empresa sigue siendo su falta de credibilidad, dado el contexto en el que se inició el proyecto: con el país en bancarrota y la empresa ofreciendo este gran proyecto, incluso para los estándares europeos, sin tener experiencia previa en planes similares.
Con todo ello, el optimismo por el proyecto solo va en aumento, dice el medio ABC. Sobre la preocupación de que los turistas que acuden en masa a Atenas puedan estar más interesados en las ofertas históricas de la ciudad antigua que en sus comodidades de última generación, el director ejecutivo de Lamda no está inquieto.