Un juez de Nicaragua impuso el lunes condenas de 10 años de cárcel a cuatro sacerdotes y dos seminaristas por traición a la patria y propagación de noticias falsas, en medio de lo que organismos de derechos humanos describen como una de las arremetidas más grandes contra los críticos del presidente Daniel Ortega.
Los seis religiosos condenados pertenecen a la diócesis Matagalpa de Nicaragua, liderada por el obispo Rolando Álvarez, crítico del gobierno y quien fue arrestado con ellos en agosto.
Álvarez se encuentra bajo arresto domiciliario en espera de juicio.
Un camarógrafo de un canal de televisión católico también fue condenado el lunes a 10 años de prisión.
“Condenamos estas acciones perversas del régimen que violentan los derechos Humanos”, dijo el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos en una publicación en Twitter.
El grupo también exigió la inmediata liberación de los religiosos.
Grupos de derechos humanos han acusado a Ortega de atacar a líderes de la Iglesia Católica críticos de su gobierno luego de las protestas en el país en 2018.
Ortega acusó a los líderes de intentar derrocarlo cuando sirvieron como mediadores con los grupos de protesta durante los disturbios que cobraron más de 300 vidas.
Desde entonces, el gobierno de Ortega ha expulsado a monjas y misioneros católicos, ha cerrado estaciones de radio y televisión católicas y ha arrestado a más de una decena de sacerdotes.
Durante el fin de semana, otro sacerdote católico de una zona rural de Nicaragua también fue sentenciado por traición y difusión de noticias falsas en un juicio separado.