Conmoción en EE.UU. por ataque calificado de terrorista con al menos 15 muertos en Nueva Orleans

El año 2025 en Estados Unidos tuvo un dramático inicio en Nueva Orleans con un ataque que dejó al menos 15 personas muertas y una serie de heridos. El autor del ataque, que en la madrugada del 1 de enero fue calificado por el FBI como un posible acto de terrorismo, cargó con un vehículo motorizado, puntualmente una camioneta, contra una multitud de personas que celebraban el Año Nuevo en el Barrio Francés de la urbe ubicada en el estado de Louisiana.

Pero la sospecha de ataque terrorista se convirtió en certeza durante la tarde, cuando el propio FBI confirmó que infundir el miedo fue parte del objetivo del ataque: en la camioneta, amarrada a una suerte de cable, ondeaba la bandera negra de ISIS, el Estado Islámico.

Según cuatro altos funcionarios, cuya identidad no fue revelada, el autor sería Shamsud Din Jabbar, de 42 años, consignó el medio local NBC News. Se trata de un ciudadano estadounidense cuya residencia oficial es Texas que no solo atropelló a la multitud que celebraba por la mañana en Nueva Orleans, sino que también disparó un arma de fuego contra los presentes. Las autoridades informaron de otra treintena de personas heridas, además de las al menos 15 fallecidas.

“Se localizó una bandera de ISIS en el vehículo y el FBI está trabajando para determinar las posibles asociaciones y afiliaciones del sujeto con organizaciones terroristas”, indicó en un comunicado el Buró Federal de Investigaciones, nombre en español del FBI.

The New York Times indicó que el sospechoso es un veterano del Ejército que se había convertido al Islam, pero se estaba “volviendo completamente loco”, dijo el nuevo marido de la exesposa del sospechoso, Dwayne Marsh.

Dentro del vehículo los investigadores encontraron armas y un posible objeto explosivo, señaló el organismo federal, todo al interior de hieleras. También se hallaron más elementos potencialmente explosivos en el Barrio Francés, mientras que la camioneta habría sido arrendada. El FBI añadió que no cree que el hombre haya actuado solo, precisamente por la presencia de bombas en distintos puntos de la zona.

En un boletín de inteligencia al que accedió The Associated Press, los investigadores detallan que los dispositivos explosivos estaban conectados entre sí para generar una explosión remota. Es más, también se descubrió un control remoto dentro de la camioneta del sospechoso.

Muchos no se habían acostado aún cuando a las 3:15 de la mañana de este 1 de enero, cerca de la intersección de las calles Canal y Bourbon, una camioneta generó el pánico entre los asistentes a las celebraciones de inicio de año.

Es un distrito del Barrio Francés conocido por atraer a grandes multitudes debido a su música y bares, explicó la agencia de noticias Reuters. En su interior iba el texano Shamsud Din Jabbar, quien estaba vestido completamente con equipo militar, dijo un líder de la ciudad al citado medio.

Según la jefa de policía local, Anne Kirkpatrick, “este hombre estaba tratando de atropellar a tanta gente como podía”, informó durante una conferencia de prensa televisada este miércoles. “Estaba empeñado en provocar la carnicería y el daño que terminó causando”.

Para lograrlo, el hombre esquivó múltiples barricadas. Luego, vino el choque y atropello contra las víctimas. Tras el impacto, Jabbar comenzó a disparar contra la policía, hiriendo a dos de ellos en el proceso.

Las fuerzas de seguridad actuaron en el acto, asesinándolo en el lugar. “Sabemos que el perpetrador ha sido asesinado”, dijo a primera hora de la mañana el concejal de la ciudad de Nueva Orleans Oliver Thomas. “Mientras buscamos el motivo del ataque, recuerden que el mal no tiene sentido”, añadió.

Uno de los testigos del hecho fue Zion Parsons, quien declaró al medio NOLA.com que él y dos amigos iba saliendo de un restaurante de Bourbon Street cuando oyeron un “alboroto”. Cuando giraron la cabeza hacia el ruido, vieron una camioneta dirigiéndose hacia ellos, transitando por la vereda. Parsons logró esquivarla, pero su amigo no.

“Grité su nombre, giré la cabeza y vi que tenía la pierna retorcida y contorsionada por encima y alrededor de la espalda. Y solo había sangre”, relató el joven, de 18 años. Luego llegaron los disparos y huyó.

“Cuando caminas por la calle, puedes mirar y ver cuerpos, cuerpos de personas, sangrando, huesos rotos”, siguió. “Corrí hasta que ya no pude oír nada”.

El ataque ocurrió pese a que Bourbon Street cuenta con barreras para evitar este tipo de atentados masivos desde 2017. Sin embargo, el hecho ocurrió justo cuando se desarrolla un importante proyecto para retirar y reemplazar las protecciones antes del Super Bowl, proyectado para febrero.

Rápidamente, el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, vinculó el ataque con la inmigración irregular, en un tema que estuvo en el centro del debate en la última carrera presidencial.

“Dije que los criminales que están llegando son mucho peores que los que tenemos en el país (…) y terminó siendo cierto”, escribió en redes sociales. Según el FBI, sin embargo, el hombre tiene nacionalidad estadounidense, y de momento no se ha indicado algún origen particular. Al contrario, autoridades indicaron que era un veterano del Ejército del país norteamericano.

Su contraparte, el saliente presidente Joe Biden, apuntó en un comunicado a que “no hay justificación para la violencia de ningún tipo y no toleraremos ningún ataque contra ninguna de las comunidades de nuestra nación”.

Si bien en un principio el FBI llamó a la precaución a la hora de calificar el ataque como “terrorista”, la alcaldesa de Nueva Orleans, LaToya Cantrell, rápidamente lo llamó como tal.

“Se trata de una situación inestable y estamos trabajando en coordinación con numerosas fuerzas del orden locales y federales para garantizar una investigación completa y exhaustiva que lleve ante la justicia a quienes puedan haber participado en este incidente”, declaró en X, antes Twitter, el gobernador republicano de Louisiana, Jeff Landry.

No ha sido el único atentado de este tipo en los últimos años. El mes pasado, Alemania fue testigo de un ataque similar, luego de que un hombre de 50 años atropellara a una multitud en un mercado navideño en Magdeburgo, matando a cinco personas e hiriendo a decenas.

En 2017 los atentados realizados por islamistas extremos bajo esta modalidad fueron múltiples: Barcelona, Estocolmo, Londres, Nueva York y nuevamente Londres vivieron en carne propia lo ocurrido este miércoles en Nueva Orleans. En 2016, en tanto, hubo ataques en Berlín y en Niza.