El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas exigió este lunes por primera vez un alto al fuego inmediato entre Israel y los militantes palestinos Hamás y la liberación inmediata e incondicional de todos los rehenes después de que Estados Unidos se abstuviera en la votación, según informó Reuters.
Los 14 miembros restantes del consejo votaron a favor de la resolución aprobada, que fue propuesta por los 10 miembros electos del organismo y propuesta en la cámara por el representante de Mozambique.
Rusia intentó enmendar el texto restableciéndolo a un borrador anterior que incluía la palabra “permanente”, pero el intento fracasó.
El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, había amenazado anteriormente con cancelar el viaje de una delegación a Washington si Estados Unidos no ejercía su veto, indicó The Guardian.
Washington se había mostrado reacio a la palabra alto el fuego anteriormente en la guerra de casi seis meses en la Franja de Gaza y había utilizado su poder de veto para proteger al aliado de Estados Unidos, Israel, mientras éste tomaba represalias contra Hamas por un ataque del 7 de octubre que, según Israel, mató a 1.200 personas.
Pero en medio de la creciente presión global para una tregua en la guerra que ha matado a más de 32.000 palestinos, según indican autoridades sanitarias de Gaza, Estados Unidos se abstuvo en la votación del lunes para permitir que el Consejo de Seguridad exija un alto el fuego inmediato durante el mes de ayuno musulmán del Ramadán, que termina en dos semanas.
Hablando después de la votación, la embajadora de Estados Unidos ante la ONU, Linda Thomas-Greenfield, culpó a Hamas por el retraso en la aprobación de una resolución de alto el fuego, según indicó Al Jazeera. “No estuvimos de acuerdo en todo con la resolución”, lo que, según ella, es la razón por la que Estados Unidos se abstuvo.