Ismail Haniyeh era la máxima figura encargada de las relaciones internacionales de Hamas y uno de los rostros más conocidos del grupo. Desde su base en Doha, Qatar, ayudó a liderar a Hamas en negociaciones de alto riesgo para un alto el fuego en Gaza y dirigió la oficina política de Hamas hasta su muerte.
Su adjunto era Saleh Arouri, quien murió en un ataque israelí en Beirut en enero y habría sido el reemplazo automático, aunque su puesto ha permanecido vacante desde su muerte.
El grupo militante palestino Hamas tiene un historial de reemplazo rápido y sin problemas de líderes caídos en ataques aéreos israelíes. Se espera que el Consejo Shura del grupo, el principal órgano consultivo, se reúna pronto, probablemente después del funeral de Haniyeh en Qatar, para nombrar a un nuevo sucesor.
La larga lista de líderes de Hamás asesinados por Israel incluye a Ahmed Yassin, fundador y líder espiritual de Hamás, en 2004; Salah Shehadeh, el fundador del brazo armado de Hamas, en 2002; Abdel Aziz Rantisi, un alto dirigente de Hamás en Gaza, en 2004; y Ahmed al-Jabari, un alto comandante, en 2012.
La composición del consejo se mantiene en secreto, pero representa a los capítulos regionales del grupo en Gaza, Cisjordania, la diáspora y los presos, indicó The Associated Press.
La reunión de todos los dirigentes puede resultar complicada por la imposibilidad de reunirse. Muchos de los casi 60 miembros del grupo se encuentran en Gaza, añadió la agencia.
Según The New York Times, es probable que el próximo jefe político de Hamas sea una figura con base fuera de Cisjordania y Gaza, ya que el puesto exige a menudo viajar. Cuando Haniyeh fue elegido por primera vez para dirigir la oficina política de Hamas, se quedó en la ciudad de Gaza, su ciudad natal, pero más tarde se trasladó con algunos miembros de su familia a Doha.
Entre los candidatos para reemplazar a Haniyeh se encuentra Khaled Meshal, ex jefe de la oficina política. Meshal lleva mucho tiempo radicado en Doha y solía sentarse junto a Haniyeh en reuniones con ministros y dignatarios visitantes.
Mousa Abu Marzouk y Khalil al-Hayya, ambos altos funcionarios de Hamas en Doha, también podrían ser parte de la discusión, dijo el diario.
Al-Hayya, el segundo al mando de Sinwar, es un dirigente destacado que nació en Gaza y que tiene importantes conexiones internacionales y buenas relaciones con el ala militar, así como con Irán, Qatar, Egipto y Turquía. Fue el primer dirigente que habló tras el ataque a Haniyeh.
Dijo que el asesinato de Haniyeh demuestra que “nuestras opciones (con Israel) son sangre y resistencia”, no conversaciones ni negociaciones.
Uno de los adjuntos de Haniyeh fue Zaher Jabarin, quien ha sido descrito como el director ejecutivo del grupo debido al importante papel que desempeña en la gestión de las finanzas del grupo y, con ello, sus buenos oficios con Irán y otros patrocinadores.
El nuevo líder político de Hamas tendrá que decidir si continúa con la opción militar y se convierte esencialmente en un grupo guerrillero y clandestino, o si elige un líder que pueda ofrecer compromisos políticos, una opción poco probable en esta etapa, indicó The Associated Press.
El papel del líder del grupo también es importante para mantener las relaciones y el apoyo de los aliados de Hamas fuera de los territorios palestinos. Igualmente importante es el respaldo de los aliados regionales al próximo líder.
Yahya Sinwar, la poderosa figura de Hamas que lidera la guerra en Gaza es poco probable que apoye el liderazgo de Mashaal.
Otro posible candidato es Nizar Abu Ramadan, que había desafiado a Sinwar por el puesto de jefe de Gaza y se considera cercano a Mashaal. Moussa Abu Marzouk, el segundo de Mashaal, es otro candidato potencial.