En su primera entrevista a un medio independiente en nueve años, el Presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, descartó ayer adelantar las elecciones y aseguró que se quedará en el poder hasta 2021 "Este tema de las elecciones anticipadas lo he escuchado, pero yo no he manifestado que hay que adelantar elecciones. Más bien, adelantar elecciones crearía inestabilidad e inseguridad, peor aún en estas condiciones", dijo el mandatario en el programa Special Report de la cadena estadounidense Fox News que conduce el periodista Bret Baier. "El pueblo va a decidir quién asumiría en 2021", añadió.
Ortega argumentó que los violentos enfrentamientos que vive Nicaragua desde el 18 de abril pasado, que han causado entre 277 y 351 muertos, han sido originados por grupos paramilitares financiados por "carteles de droga" y "otros organismos".
"Por la noche, cuando no hay manifestaciones pacíficas, hemos tenido ataques provocados por las fuerzas paramilitares, organizadas por gente que está en contra del gobierno", insistió el Presidente, quien aseguró que en los últimos días se ha dado un proceso de "normalización" de la situación.
Sobre el tema de la Iglesia Católica, a cuyos obispos Ortega acusó de "golpistas" en su discurso del 19 de julio, el mandatario dijo en la entrevista que "no tenemos ningún problema con la Iglesia Católica" y agregó que "no ha muerto ningún nicaragüense en ninguna iglesia, eso es falso". "Ha sido una campaña de mentiras, de terribles mentiras, para tratar de dañar la imagen de Nicaragua", añadió.
Sin embargo, el diario La Prensa recordó que el pasado 14 de julio el estudiante de la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN, en Managua), Gerald Vásquez, falleció dentro de la parroquia Divina Misericordia producto del ataque que fuerzas paramilitares ejecutaron contra los universitarios atrincherados en ese recinto. La parroquia abrió sus puertas para atender a los heridos.
Asimismo, Ortega mencionó al obispo auxiliar de Managua, Silvio Báez, una de las voces más críticas del régimen, y dijo que Báez "tiene su forma de pensar y actuar, no es nuevo su discurso. Desde que llegó a Nicaragua llegó con ese discurso porque él no vivió en Nicaragua la época de la guerra". La Prensa señala que Báez fue atacado por turbas a favor del gobierno cuando, junto a una comitiva del clero de Managua, incluido el Nuncio Apostólico, llegó a la Basílica San Sebastián, en Diriamba. En ese incidente el obispo quedó con una herida en el brazo.
"No hay ningún sacerdote que esté siendo perseguido, no hay un solo sacerdote que pueda decir que ha sido agredido por el gobierno", aseguró Ortega. No obstante, tanto la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, como la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos han responsabilizado al gobierno nicaragüense de graves violaciones a los DD.HH.
Ortega también aprovechó de dar un mensaje a su homólogo estadounidense, Donald Trump, a quien recordó que las relaciones bilaterales han sido "muy dolorosas", por lo que dijo que no quiere que la historia se repita. "Somos un país pequeño, con una economía frágil, pero merecemos respeto", indicó en alusión a los distintos pronunciamientos del Congreso estadounidense y la Casa Blanca sobre la crisis en el país centroamericano.
Por otro lado, en Managua se llevó a cabo ayer una masiva marcha en apoyo a los estudiantes nicaragüenses. Una manifestación que también se replicó en otras ciudades del país. Según la agencia EFE, miles de personas se sumaron a la marcha, para conmemorar el Día Nacional del Estudiante, que recuerda la "masacre estudiantil" de 1959, cuando una represión del Presidente Luis Somoza dejó cuatro universitarios muertos, pero también para reclamar por más de un centenar de alumnos que han perdido la vida en protestas contra Ortega.
La marcha se inició en el extremo sureste de Managua, con un minuto de silencio dedicado a los estudiantes que, según los manifestantes "autoconvocados", han sido asesinados durante las protestas.