Un siniestro que arrasaba más de 7 mil hectáreas en Paradise, al norte de California, consumiendo al menos un millar de inmuebles, obligó a la evacuación de decenas de miles de personas de esa zona.
La portavoz del alguacil del Condado de Butte, Miranda Bowersox, dijo que a todos los residentes de Paradise, de 27.000 habitantes, recibieron la orden de evacuar.
"Es malo", comentó el alguacil del condado de Butte, Kory Honea, al Enterprise-Record. "Estamos tratando de sacar a la mayor cantidad de personas lo más rápido posible y salvar la mayor cantidad de vidas posible".
Rick Carhart, vocero de Cal Fire, el departamento de bomberos de California, indicó que el incendio forestal afectó a unas 30.000 personas en las ciudades de Paradise, Concow y otras comunidades pequeñas. "El fuego está siendo impulsado por vientos bastante fuertes", señaló. "Está muy seco y tenemos poca humedad y, lamentablemente, esas son condiciones excelentes para que un incendio se propague".