La policía de París detuvo a más de 200 personas por los disturbios que han tenido lugar en la noche del jueves en la capital francesa, en protesta a la aprobación mediante un artículo de la Constitución por parte del Gobierno de Emmanuel Macron de la reforma de la pensiones, la cual aumenta la edad de jubilación de 62 a 64 años.
Concretamente, 217 personas han sido arrestadas tras incendiar y dañar mobiliario público y tras enfrentarse a las fuerzas de seguridad, según detalló en un informe la jefatura de la policía de París.
Miles de personas se han congregado en la Plaza de la Concordia de París, a unos pasos del Parlamento francés, para denunciar el “paso forzado” del Ejecutivo al hacer uso del artículo 49.3 de la Constitución para la reforma de las pensiones, la cual no había conseguido el apoyo de la Asamblea Nacional para que saliera adelante.
La policía hizo uso de cañones de agua y de gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes, alejándolos de la Asamblea Nacional francesa. Tras varias horas de disturbios, las tensiones en las calles han llegado a su fin.
En tanto, los principales sindicatos de Francia han anunciado una gran jornada de manifestaciones para el próximo jueves 23 de marzo para pedir la retirada total de la reforma, mientras que la oposición presentará una moción de censura a la primera ministra, Elisabeth Borne, este viernes.
Las protestas se dan en una jornada en la que el Gobierno francés ha decidido utilizar el artículo 49.3 de la Constitución, lo que evita someter a votación en la Asamblea Nacional gala la reforma de las pensiones, después de constatar que carece de la mayoría suficiente para sacar adelante uno de los proyectos estrella del presidente, Emmanuel Macron.
La primera ministra francesa ha defendido la aplicación del artículo 49.3 de la Constitución y aseguró, durante una entrevista en la cadena TF1 Info concedida este jueves, que han trabajado “hasta el último minuto” para obtener una mayoría sobre la reforma de las pensiones.
Borne ha reconocido que entiende “el gran esfuerzo” que tendrán que hacer los franceses para trabajar “durante dos años más”, aunque ha expresado que “dejar que la gente crea que podemos pagar todo con deuda no es serio”.
También ha comentado los abucheos, gritos de dimisión y cánticos de la oposición vividos durante la jornada en una tensa sesión en la Asamblea Nacional. “Eso refleja que cierto número de grupos de oposición no respetan nuestras instituciones. Algunos quieren el caos”, sentenció.