"Acepto ser el candidato del cambio. Acepto ser candidato a la Presidencia de la República". Con esas palabras, el presidente de la Cámara de Diputados de Brasil, Rodrigo Maia, lanzó ayer su precandidatura por el sillón del Palacio de Planalto, sumando así un nuevo aspirante al superpoblado espacio de derecha y centroderecha, que de momento no despega en las encuestas de cara a las elecciones del 7 de octubre. Maia cultiva un particular perfil, ya que nació en Chile.
La candidatura de Maia fue anunciada en la convención nacional del centroderechista Demócratas (DEM), realizada ayer en Brasilia, en la que también participaron dirigentes de otras formaciones que apoyan al Presidente Michel Temer, quien aún no ha anunciado su apoyo a ningún candidato a sucederlo pese a insistir en que no está interesado en una posible reelección.
El DEM, una formación que surgió de políticos que daban sustento al régimen militar que gobernó Brasil entre 1964 y 1985 y que actualmente cuenta con cuatro senadores y 33 diputados, aclaró que por ahora trata a Maia como un precandidato debido a que aún no descarta aliarse con otros partidos en caso de que surja una candidatura con más opciones.
Aliado histórico del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), la formación liderada por el ex presidente Fernando Henrique Cardoso, el DEM no tiene un candidato propio en la carrera al Palacio del Planalto desde las elecciones de 1989, cuando postuló al diputado Aureliano Chaves. Después se alió al PSDB y apoyó a todos sus candidatos presidenciales desde entonces.
Sin embargo, en una entrevista con el diario Folha de Sao Paulo en la víspera del lanzamiento de su candidatura, Maia eligió al PSDB como su principal adversario y dijo que formar una lista con Geraldo Alckmin, hoy, sería, en sus palabras, "una negligencia política".
En la misma entrevista, Maia no se restó a una eventual contienda con el actual Presidente de Brasil. "Si él (Temer) es candidato, voy a competir contra él. Seré candidato hasta el final, incluso con la participación de Temer".
Según el portal G1 de Globo, el DEM intenta distanciarse de Planalto para viabilizar el nombre de Maia hasta junio, cuando los partidos tienen que realizar las convenciones para oficializar a los candidatos que entrarán en disputa.
En su discurso, Maia dijo que quiere "construir con el pueblo brasileño un pacto para romper con lo que hay de viejo y atrasado en la política brasileña". Asimismo, aseguró que su candidatura va a "despegar" a pesar de que las encuestas de opinión recientes le atribuyen el 1% de las intenciones de voto.
"Maia tiene muy pocas posibilidades de éxito como candidato a la presidencia. En verdad, creo que está lanzando la candidatura sólo para ampliar el espacio de negociación", explicó a La Tercera Sylvio Costa, fundador de Congresso em Foco, un grupo que vigila y rastrea la corrupción legislativa.
Maia, uno de los principales promotores de la destitución de la ex Presidenta Dilma Rousseff, nació en 1970, en Santiago. En su sitio web, el político señala que su nacimiento fuera de Brasil fue debido a la represión política de la dictadura militar que exilió a su padre, Cesar Maia, integrante del Partido Comunista Brasileño.
Cesar Maia fue arrestado tras el golpe militar de 1964. Tenía 19 años y estudiaba Ingeniería en la Universidad Federal de Ouro Preto de Minas Gerais. Exiliado a Chile en 1968, continuó sus estudios en la Universidad de Chile y conoció a quien sería su mujer, Mariângeles, con quién el 12 de junio de 1970 tendría gemelos (la hermana de Rodrigo Maia se llama Daniela). La familia volvió a Brasil en 1973, poco antes del golpe en Chile.